AAR CK - El Ebro, la última frontera. Un AAR Navarro

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Las brujas de Macbeth, las brujas de Macbeth!
 
Pues por esa época, si no me equivoco, lo que toca es la comilona que los de Zugarramurdi hacen dentro de las cuevas. Así que, básicamente, lo que hay son muchos borrachos subiendo a gatas las escaleras hacia la salida. :rofl:
 
Bueno, poquito a poco me lo he vuelto a leer entero porque ya no me acordaba de nada. :D

La narración exquisita, como siempre. ;)

Eso sí, a ver si nos damos algo más de brío y no tengo volver a leerme lo del principio una tercera vez, ¿eh? :p
 
Bueno, poquito a poco me lo he vuelto a leer entero porque ya no me acordaba de nada. :D

La narración exquisita, como siempre. ;)

Eso sí, a ver si nos damos algo más de brío y no tengo volver a leerme lo del principio una tercera vez, ¿eh? :p

Gracias :eek:o:)

Esta vez he hecho propósito de enmienda, y pretendo terminarlo de verdad. :)
 
Pues no te pares y continúa, pondios.
 
Pues no te pares y continúa, pondios.

Estoy en ello, tengo la siguiente a medio escribir :). Pero llevo unos días locos, y gracias a la pausita vacacional semanasantera voy a poder darle un empujoncito a esto :cool:
 
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XV - Ramiro ad portas



Cuartel general Taifal, 9 de agosto de 1076

Apenas han sido acallados los últimos conatos de resistencia cuando el conquistador de la ciudad traspasa la puerta principal de su nuevo cuartel general y residencia. La guardia de honor se ha apresurado a hacer que el lugar resulte más agradable a la vista de su señor, eliminando los pendones y símbolos religiosos de los vencidos, o cubriéndolos con grandes tapices que proclaman a todo aquel que los lea que no hay más Dios que Alá, que Mahoma es su profeta, y que al-Muqtadir Billah, el Poderoso gracias a Dios, ordena que dicha verdad sea proclamada a los cuatro vientos.

“Al-Muqtadir Billah”, hacía mucho tiempo desde la última vez que pude realmente sentir que lo era. Decenas de noches en vela, cientos de rezos pidiendo a Alá una señal,algo que me mostrase en qué le había fallado para que me retirase su favor y permitiera que mi reino fuese asediado y troceado por los cristianos. Mi hermosa Saraqusta tomada, mi palacio, monumento a la gloria de Alá y a la victoria en la yihad convertido en la residencia de un infiel desleal a su propio rey, para mayor deshonra y oprobio. Las perlas de mi reino, las medinas de Tutila, Tyrassona, Qalat-Ayyub, Qalat-Darawqa, Wasqua, Barbaschter y Afraga, todas perdidas en menos de cuatro años a manos de Ramiro, el perjuro perro fiel de Sancho (1), ese pusilánime montañés que no tuvo arrestos ni para reclamar la ciudad que su ejército conquistó (2), y del que dicen pasa sus días recluido en Naxara, entregado a las libaciones y el placer.

¡Ramiro ibn Garcia, que Alá maldiga mil veces su nombre! Me ha arrebatado el corazón de mi reino y, no contento con eso, me ha puesto en evidencia subyugando a quienes yo mismo no pude. Dicen que una semana tan solo le bastó (3) para lo que yo en treinta años no puede: someter a mi hermano Yusuf y hacerse con el control de Larida (4) y sus fértiles tierras ¡Y sin derramar una gota de sangre! Me queda el triste consuelo de que los Banu Razin, perdido su reino, son ahora simples capitanes de mi ejército mientras esperan volver a reclamar lo que creen es suyo.

He tenido que hacerme fuerte en los territorios de los que fueron mis vasallos, y buscar aliados fuera de Al-Andalus, porque los reyes de aquí esta vez me han negado su auxilio en la Yihad. ¡Necios orgullosos! Negándome su auxilio por creerme demasiado ambicioso, demasiado peligroso, están fortaleciendo a un león que no tendrá reparo alguno, si nadie se lo impide, en devorarles en cuanto les llegue el turno. Hasta Túnez tuve que viajar para mendigar ¡mendigar! ayuda, que bien cara me saldrá.

Pero hoy, hoy es un día de victoria. La marea ha cambiado, lo siento en los huesos, ahora sí sé que estoy haciendo lo correcto a los ojos del Todopoderoso. Alá me ha devuelto su favor, y yo le devolveré su observancia a las tierras de las que fue expulsado ¡y someteré a quienes se atrevieron a desafiar su poder!​

Moctadir entra en la cámara que se albergará su salón de audiencias y deliberaciones de guerra en los años sucesivos. Allí le esperan sus generales, quienes aún no se han levantado el casco siquiera, con las vestiduras que recubren las armaduras cubiertas de polvo, sangre y cenizas. En cuanto su señor entra en la estancia, todos a una se descubren la cabeza, elevan los cascos al cielo y cantan voz en grito sus alabanzas a Alá y a Moctadir, quienes les han guiado a la victoria. Moctadir recorre la estancia, reconociendo con el gesto las alabanzas de sus generales y, una vez llegado a los pies del improvisado trono, en el que se han tapado con cojines y telas los motivos cristianos, se pone rodilla en tierra y comienza el rezo de agradecimiento. Una vez cumplidas las obligaciones espirituales, es momento de ocuparse de los asuntos mundanos. Moctadir se acomoda en su trono y comienza el consejo de guerra.


- Hoy, gracias a Alá, comienza un nuevo periodo en esta guerra contra el infiel. Con esta victoria, que resonará no solo en toda Al-Andalus, sino en el mundo entero, dejamos claro que desde este momento ya no cederemos un palmo más de terreno. Los infieles, confiados en sus victorias fáciles, han mordido más de lo que pueden masticar, y vamos a dejarles sin dientes, para luego hacerles salir corriendo de todos los lugares en los que nunca debieron entrar. Y cuando esto esté hecho, les empujaremos hasta el mar del norte, donde se ahogarán sin remisión. Con nuestras fuerzas, y el apoyo que los ziríes nos proporcionan, es solo cuestión de meses. Y ahora, pasemos a revisar la estrategia que seguiremos para lograrlo...​


El sol casi se ha puesto cuando el consejo está discutiendo los últimos puntos de la estrategia. Cuando se está hablando de qué hacer con los cristianos de la plaza, cómo asentar la conquista, y cómo recompensar al ejército por el valor y arrojo mostrado durante la captura, los guardias de la estancia dan parte de que un mensajero está aguardando en la puerta, con noticias urgentes. Moctadir ordena que se le conduzca ante él - serán nuevas de las fuerzas ziríes acampadas al norte - encontrándose con uno de sus propios hombres, cubierto de heridas mal vendadas y más cubierto de polvo y sangre que él mismo o sus capitanes.


- Habla cuanto antes, emisario, para que recibas los cuidados que precisas. ¿Qué sucede?
- Mi señor, soy Amrús, uno de vuestros capitanes del ejército destacado en Turtusha...​


Pero Amrús ha consumido todas sus fuerzas en llegar hasta la presencia de su rey y enmudece en ese momento. Aun logra aprovechar una última reserva en extraer un pergamino y tenderlo hacia Moctadir, para acto seguido desplomarse pesadamente. El propio Moctadir recoge el pergamino, que ha rodado hasta sus pies y, al leerlo, le cambia el semblante ¡No puede ser! ¡Este era mi momento de gloria!


- Señores, nuestros planes van a sufrir una ligera modificación. No va a haber tiempo para celebraciones, pues tendremos que limpiar primero nuestra propia retaguardia. Que de entre la guardia de honor se reclute una guarnición fuerte para mantener tranquila la plaza mientras solucionamos esto. Partimos al alba en dirección a Turtusha. Ramiro el perjuro ha derrotado a nuestro ejército del sur y se ha plantado frente a las puertas de la ciudad.​


Con la noticia, Moctadir ha perdido las ganas por las celebraciones y placeres que le esperaban tras el consejo. Una vez despedido su consejo, ordena que le preparen la tienda en el patio y se prepara para una noche de oración.

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La segunda batalla de Tortosa, victoria total de los ejércitos pamploneses (5)

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El nuevo palacio de Al-Moctadir. Ya que le han arrebatado la Aljaferia, se ha buscado un sustituto apañado en la costa :D (6)​






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(1) La versión de la historia sobre cómo cayó Calatayud que circulaba en los territorios de Moctadir, Ramiro era el instigador y único culpable de la muerte de la embajada que buscaba pedir la rendición de la plaza.

(2) Otra parte de la historia que le llegó “ligeramente” alterada. El destacamento castellano era el más numeroso que el pamplonés, y en la fase final del asedio Rodrigo de Vivar era el comandante único de la hueste cristiana. Pero sí es cierto que Sancho se dedicó a ver pasar el tiempo en Jaca, sin mover el ejército que tenía movilizado. Cosas inexplicables de la IA...

(3) Exageraciones, viles exageraciones fruto de mentes ya vencidas. Las negociaciones de capitulación y vasallaje duraron no una semana, sino un mes :D. Tener un potente ejército acampado delante de tus murallas, y la amenaza velada de arrasar toda la tierra a su alrededor ayudan, pero no hacen milagros...

(4) Dado que los condes de Barcelona no han movido ni un dedo en la Reconquista en lo que va de partida, he decidido ignorar que la situación de partida del escenario les concede Lérida, la cual estaba a unos añitos de distancia de ser tomada.

(5) ¿Una segunda batalla?¿Qué ha pasado con la primera? Pues habrá que esperar a un próximo capítulo :D (7)

(6) Espero me permitáis la licencia de revelar la localización del protagonista del capítulo utilizando una imagen pelín anacrónica del lugar :D, no he encontrado ninguna recreación del que existía en el siglo XI.

(7) Sí, para saber desde cuándo y porqué los territorios catalanes prestan ahora obediencia a Sancho de Pamplona habrá que esperar también a un nuevo capítulo. Zoi pedvedzo, lo sé :D
 
(7) Sí, para saber desde cuándo y porqué los territorios catalanes prestan ahora obediencia a Sancho de Pamplona habrá que esperar también a un nuevo capítulo. Zoi pedvedzo, lo sé :D


Eres triplemente perverso porque tras el "cliff-hanger" del capítulo anterior en este no has contado como le fue a Sancho en el botellón que tenían organizado en la covacha esa.


Esto ya parece "Perdidos" macho. :D


Como te atrevas a meter un oso polar en el relato te invado Navarra en mi AAR nórdico. :mad::mad::p
 
Eres triplemente perverso porque tras el "cliff-hanger" del capítulo anterior en este no has contado como le fue a Sancho en el botellón que tenían organizado en la covacha esa.


Esto ya parece "Perdidos" macho. :D


Como te atrevas a meter un oso polar en el relato te invado Navarra en mi AAR nórdico. :mad::mad::p

:cool: :D

Para poder resolver cliffhangers, primero necesito un capítulo más para cerrar el libro segundo :D El libro tercero comienza con las primeras consecuencias del botellón :p y la unión con Cataluña. El título provisional de ese primer capítulo del libro tercero es "Sexo, mentiras y rollos de pergamino" :D
 
(6) Espero me permitáis la licencia de revelar la localización del protagonista del capítulo utilizando una imagen pelín anacrónica del lugar :D, no he encontrado ninguna recreación del que existía en el siglo XI.

Cagonlapús! Que el moromielda se ha plantado en Barna! Que está en la catedral de botellón!!!! San Jordi i desperta Ferrrrrrrro!!!!!

Que lo crujo, que lo crujo! Que al moromielda ese lo crujo a collejas!!!!


Macasumlolla.
 
High class Carmir!!! high class!! Peazo de continuación te has currado!!!

Me levanto y me quito el sombrero...;)
 
:cool: :D

Para poder resolver cliffhangers, primero necesito un capítulo más para cerrar el libro segundo :D El libro tercero comienza con las primeras consecuencias del botellón :p y la unión con Cataluña. El título provisional de ese primer capítulo del libro tercero es "Sexo, mentiras y rollos de pergamino" :D

Queremos ya "Sexo, mentiras y rollos de pergamino"!!! Esto parece un proyecto de los de Kubrick (por lo eterno).
 
Queremos ya "Sexo, mentiras y rollos de pergamino"!!! Esto parece un proyecto de los de Kubrick (por lo eterno).

Sólo falta un poquito más. Antes de escribir ese tengo que resolver la conquista del Bajo Ebro y poner en situación el porqué de la conquista de Barcelona. :)

O de GRR Martin, polomenos :D

Bueno, dije que lo terminaría, pero no en cuánto tiempo :D:rofl::rofl::rofl:


Y ahora, las buenas noticias. Hoy actualizo :cool:
 
Sólo falta un poquito más. Antes de escribir ese tengo que resolver la conquista del Bajo Ebro y poner en situación el porqué de la conquista de Barcelona. :)

¿Para asegurarle una buena plantilla al Osasuna?
 
¿Para asegurarle una buena plantilla al Osasuna?

Yo creo que ni así lograban hacer algo :D

A ver si el servertubisi me deja colgar el tocho :wacko:
 
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XVI - Non plus ultra?​



Tortosa, primavera-verano de 1076


Extractos de "Una historia de la Reconquista Navarra". J. Valente y C.M. Roger (eds.). Ediciones Universidad de Navarra, Valencia, 2003.


En el ultimo cuarto del siglo XI, la balanza de poder en el valle del Ebro parecía ya completamente decantada hacia el lado cristiano. Tan sólo quedaba bajo el control de Moctadir la antigua Taifa de Tortosa (la que, irónicamente, había sido su última conquista hacía menos de una década), y el hecho de que su señor llevase más de un año ausente de ella, por estar recorriendo los palacios del Norte de África, tratando de conseguir un ejército, contribuía muy poco a la moral de las guarniciones. El tema de conversación principal en las fuentes y a la salida de los rezos, no era ya sí o cuándo llegaría el ataque definitivo cristiano, sino quién lograría llegar primero ante los muros de la Medina de Turtusha: los hasta el momento imparables ejércitos pamploneses, veteranos curtidos en 6 años de campañas ininterrumpidas contra la Taifa, o la nueva y flamante mesnada que el joven Conde de Barcelona había logrado trabajosamente reunir.


En 1075, los condados catalanes eran los convidados de piedra de la Reconquista. Todo intento de expansión se había visto frustrado, por una parte, por la reclusión de Ramón Berenguer I en su palacio de Barcelona durante los últimos años de su vida, aquejado de una dolorosa enfermedad y, por otra, por la fortaleza mostrada por Moctadir, quien había logrado reducir a la obediencia a la Taifa de Lérida en 1071, y conquistado la de Tortosa en 1073. La situación no cambió sustancialmente tras el fallecimiento de Ramón el Vell tras una larga agonía en 1074, a causa de las disputas entre sus dos hijos, Ramón y Berenguer, por la supremacía en el condado. La parálisis catalana no comenzaría a desvanecerse hasta bien entrado 1075, cuando Ramón Berenguer II se convirtió en gobernante único (3) tras la muerte de su hermano en extrañas circunstancias (y por lo que, en las crónicas escritas durante estos primeros años de su gobierno fue frecuentemente denominado como "el fratricida").

Existe un consenso general en que la guerra contra las Taifas del Bajo Ebro fue relanzada por Ramón como forma de conseguir asentar su autoridad sobre el resto de nobles catalanes (1). Éstos desconfiaban de él (la mayoría de ellos, abiertamente), ya que se le consideraba poco capacitado para el gobierno y la milicia, si bien se le reconocían grandes dotes para la intriga y el subterfugio (2). No obstante, la caída de Lérida y su fértil comarca ante las tropas pamplonesas, y el evidente desmoronamiento de la taifa zaragozana, hicieron patente la imperiosa necesidad de unión entre los nobles catalanes si éstos no querían verse privados de futuras expansiones territoriales en terreno musulmán. Así, cuando en febrero de 1076 Ramón Berenguer II convocó en Barcelona a los nobles para levantar un ejército con el que tomar Tortosa, éstos respondieron a la llamada con relativa rapidez.

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Primera batalla. 26 de abril de 1076.

Tortosa-1.png

Comandado por el propio Ramón, el ejército conjunto salió de Barcelona en abril del mismo año, avanzando rápidamente en un principio, y tomando la casi despoblada Tarragona sin oposición digna de tal nombre. A comienzos de mayo el ejército estaba a las puertas de Tortosa, y fue allí donde encontraría la primera oposición seria. Al tener noticia de la llegada de Ramón, el gobernador de la medina organizó las poco motivadas fuerzas que estaban bajo su cargo, una heterogénea mezcla compuesta por las tropas de la provincia, mercenarios beréberes y los restos de las huestes taifales que habían tomado refugio allí tras las derrotas sufridas en Zaragoza (1072), Fraga (1074) y Lérida (1075). Mutarrif, a quien Moctadir había sido puesto a cargo de Tortosa poco antes de embarcar hacia Túnez en busca de aliados, tenía la misión de resistir hasta la llegada de refuerzos al mando de su señor, y sabiendo que Moctadir estaba próximo a regresar, decidió recibirlo con una victoria y salir al encuentro de los invasores.

La batalla tuvo lugar a media jornada de la propia ciudad y, según las crónicas, se prolongó durante todo un día. Mutarrif, pese a todo, no había logrado levantar la moral de su ejército y tras de un poco decisivo primer choque, vio como se hundía su frente, por lo que terminó huyendo con los restos de la caballería hacia la costa, donde se suponía que Moctadir estaba pronto a arribar.

La huida de Mutarrif supuso un golpe mortal para la moral de la guarnición que defendía la ciudad, y decidieron capitular en la esperanza de un trato clemente. Sin embargo, el pueblo, convencido de la inminente llegada de refuerzos se sublevó. En las horas siguientes, se pudo ver cómo los derrotistas eran arrojados por las murallas, y la ciudad se preparaba para resistir. El asedio propiamente dicho comenzaría al día siguiente.

Segunda batalla. 10 de mayo de 1076.

Tortosa-2.png

El esperado ejército de Moctadir arribó al fin escasamente una semana después de la primera batalla. Compuesto por un reducido núcleo de fuerzas propias leales, así como por tropas procedentes de Denia y, sobre todo, de mercenarios tunecinos, el ejército era lo bastante grande como para presentar una seria amenaza y hacer creíbles las proclamas de Moctadir de que con él iba a recuperar el terreno perdido y devolver la afrenta. El ejército condal, sorprendido por su llegada, levantó rápidamente el asedio y salió a su encuentro con la esperanza de derrotarlo antes de que lograra organizarse tras el caos del desembarco. Ciertos comentarios en algunas de las crónicas posteriores sugieren que los informes de exploración catalanes habían subestimado considerablemente el tamaño real de la fuerza taifal, y que ese sería el motivo real por el que Ramón dispuesto a terminar definitivamente con Moctadir y cortar de raíz cualquier intento posterior de rescate. Al parecer, tal fue la prisa y la confianza que apenas se desplegaron exploradores y, cuando el ejército estaba a poco más de media jornada de Tortosa, fue sorprendido por la vanguardia de Moctadir. Desprevenido, y en formación de avance, el ejército condal no pudo presentar un frente coordinado y terminó desbaratado en poco tiempo. La tropa condal salió huyendo en dirección al norte, y sería perseguida por Moctadir hasta Tarragona. La fácil victoria musulmana obtenida en esta segunda plaza, de la que Ramón huiría en pleno combate, presa del pánico, tendría su dolorosa consecuencia final a comienzos de agosto, con la conquista y creación de la Taifa de Barcelona. En la propia Tortosa Moctadir dejó una nutrida retaguardia que debería esperar a la inminente llegada de Ramiro, al mando de la tropa pamplonesa.

Tercera batalla. 3-4 de agosto de 1076.

Tortosa-3.png

La tropa del Mariscal y Duque de Navarra, reforzada por el contingente castellano al mando del Conde de Zaragoza, llegó a las inmediaciones de Tortosa a finales de julio. De esta tercera batalla, presumiblemente la más equilibrada en fuerzas de las tres, sorprendentemente poco se sabe aparte de su resultado final. La veteranía de la fuerza atacante, curtida en seis años de campaña continua, así como la habilidad de sus comandantes al parecer fueron los factores decisivos que lograron decantar el resultado a favor de Ramiro tras dos días de combate. El derrotado ejército taifal, en lugar de refugiarse en la ciudad, partió en la dirección de Tarragona para reunirse con su señor. Este movimiento resultó mortal para la moral de Tortosa. Descabezada, desmoralizada, aislada, y sin medios con los que defenderse del asedio, los notables decidieron capitular y obtener con ello el mismo trato que Ramiro había concedido hasta ese momento a todas las ciudades que caían en su poder. En los acuerdos de capitulación firmados el 10 de agosto, la ciudad recibiría el fuero de Tudela.

La conquista de Tortosa marcó el fin de la Taifa de Zaragoza propiamente dicha, aunque no la de su antiguo gobernante, Al-Moctadir, quien...

Finis secunda pars​


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(1) Lo que comúnmente se denomina "desviar la atención", vamos :D
(2) Y si en la campaña algún que otro de los públicamente desafectos recibía una fatal herida, miel sobre hojuelas :rolleyes:
(3) Butterflies, butterflies :D
 
Last edited:
Pero si me has vuelto un moromielda!!!!

A ver, tú, acelerao, ya estás arreglando eso.





Por otra parte, creo que te has liado de hermano. Brevemente, tochazo pa tí, de gratis...

Ramón, hijo de Ramón Berenguer I el Viejo, no llegó a suceder a su padre porque tuvo un pequeño problema con la segunda esposa de su padre, es decir, su madrasta. El pequeño problema era que la segunda esposa, Almodís, procuraba que sus dos hijos, Berenguer Ramón y Ramón Berenguer (los padrinos de los niños eran unos cachondos, huelga decirlo), pillaran cacho de todo, casi siempre a costa de Ramón, que, como buen peninsular e hijo de su madre, pillaba unos rebotes tremendos que acabaron muy mal: a saber, con Almodís asesinadita, su papi viudito y él excomulgadito y cascando de cualquier manera por ahí -en tierras de moros, se dice-.

Los hijos de Almodís tampoco es que acabaran muy bien, pues, una vez muerto su padre, los dos compartieron el condado, y eso no debió gustar en exceso a Berenguer Ramón, pues hizo matar a su hermano, Ramón Berenguer. Fue, por cierto, el crímen casi perfecto, pues hoy en día se siguen sin tener pruebas de quien carajo se cargó al Cap D'Estopas, como era conocido Ramón Berenguer. En fin, que las malas lenguas decían, pero no podían demostrar, hasta que el tonto de Berenguer Ramón perdió lo que en aquella época se estilaba como el "Juicio de Dios", y ñaca, quedó como el culo y con apodo, a saber, el Fratricida. A la larga acabó cediendo el título a su sobrino, hijo del difunto Cap D'Estopas, y se dice que el asesinillo de Berenguer Ramón acabó sus días como cruzado en Jerusalén.

O sea, que Berenguer Ramón no es el Cap d'Estopas, sino el Fratricida.
 
Pero si me has vuelto un moromielda!!!!

A ver, tú, acelerao, ya estás arreglando eso.

Tranquilo, que esto no ha hecho más que empezar :D Además, podría ser peor, mira que a los tarragoneses les acabo de hacer navarros, y a los valencianos les he amenazado con ello :rofl: :rofl:



Por otra parte, creo que te has liado de hermano. Brevemente, tochazo pa tí, de gratis...

Ramón, hijo de Ramón Berenguer I el Viejo, no llegó a suceder a su padre porque tuvo un pequeño problema con la segunda esposa de su padre, es decir, su madrasta. El pequeño problema era que la segunda esposa, Almodís, procuraba que sus dos hijos, Berenguer Ramón y Ramón Berenguer (los padrinos de los niños eran unos cachondos, huelga decirlo), pillaran cacho de todo, casi siempre a costa de Ramón, que, como buen peninsular e hijo de su madre, pillaba unos rebotes tremendos que acabaron muy mal: a saber, con Almodís asesinadita, su papi viudito y él excomulgadito y cascando de cualquier manera por ahí -en tierras de moros, se dice-.

Los hijos de Almodís tampoco es que acabaran muy bien, pues, una vez muerto su padre, los dos compartieron el condado, y eso no debió gustar en exceso a Berenguer Ramón, pues hizo matar a su hermano, Ramón Berenguer. Fue, por cierto, el crímen casi perfecto, pues hoy en día se siguen sin tener pruebas de quien carajo se cargó al Cap D'Estopas, como era conocido Ramón Berenguer. En fin, que las malas lenguas decían, pero no podían demostrar, hasta que el tonto de Berenguer Ramón perdió lo que en aquella época se estilaba como el "Juicio de Dios", y ñaca, quedó como el culo y con apodo, a saber, el Fratricida. A la larga acabó cediendo el título a su sobrino, hijo del difunto Cap D'Estopas, y se dice que el asesinillo de Berenguer Ramón acabó sus días como cruzado en Jerusalén.

O sea, que Berenguer Ramón no es el Cap d'Estopas, sino el Fratricida.

Te agradezco mucho el apunte :) Estoy bastante pez en historia de la Cataluña medieval y, más allá de lo básico, me pierdo. Eso sí, con este AAR estoy leyendo bastantes cosas, de modo que al menos en la culturilla general empiezo a estar un poco más suelto. Ahora bien, en este caso el intercambio de hermanos ha sido intencionado :D, de ahí la referencia a las mariposas en la nota 3. M'explico: el caso es que, en realidad, en esta fase de la partida Ramón I estaba vivito y coleando. De hecho, no solo no murió en 1076, sino que se agarró al sillón hasta al menos 1100 (tendría que revisar mis notas de la partida para esos años). El caso es que para lo que tengo en mente en los próximos capítulos, un Ramón casi sesentón (y con un par de rasgos de enfermedades "interesantes" :D) no cuadraba, así que decidí tirar por la calle de en medio, "matarlo" y darle el puesto al Ramón veinteañero que tenía a mano :D Total, con lo retorcida que está la historia real en este punto, una vuelta de tuerca más no se iba a notar :rofl:
 
Tú no sabes los comienzos culoprietos que he tenido yo por culpa de eso -soy un pureta, no puedo evitarlo-. Casi siempre la solución era, como Ramonet era una especie de Cid a la catalana, confiar en que los moros me hicieran un favor. A veces funcionaba...