• We have updated our Community Code of Conduct. Please read through the new rules for the forum that are an integral part of Paradox Interactive’s User Agreement.
Veo que el AAR ha vuelto fuerte, después de las fiestas del torico.:rofl:
 
Pues si, los occitanos han vuelto con ganas de guerra y van dando caña a los infieles y ampliando los limites del ducado de Provenza.


CAPITULO 17. LUTO EN PROVENZA

A finales de octubre de 1091 el temido ejército comandado por el alcalde Mahtar está a punto de llegar a Salerno con el fin de desalojar definitivamente al ejército occitano de la provincia. Mahtar dispone de casi tantos efectivos como el duque Guilhem por lo que los líderes provenzales no están seguros de poder resistir el embate.

1701.png

Además su comandante, el duque Guilhem, ha comenzado a sentirse mal en los últimos días, con fuertes fiebres, tos, moqueo e intensos dolores de cabeza que no le dejan levantarse de la cama y mucho menos ponerse al frente de sus hombres para liderar el combate que se está preparando. Y mientras la salud de Guilhem empeora dia a dia, las tropas musulmanas no dejan de acercarse.

1702f.png

Ante esta situación tan desfavorable el ejército provenzal retrocede y se encierra dentro de las murallas de la ciudad costera de Amalfi pero a principios de diciembre el ejército de Mahtar ya se encuentra en los alrededores cerrando el cerco de la ciudad a la que se dispone a someter a asedio. El duque, desde su cama, ordena a su ejército presente batalla a los infieles y así los soldados occitanos salen a campo abierto donde se enfrentan, con ligera superioridad numérica, al ejercito musulmán. Pero la batalla es larga, dura y cruenta, y tras perder a mas de la mitad de sus hombres, el ejercito cristiano debe resignarse a retroceder y volver a encerrarse entre los muros de Amalfi, cosechando su primera derrota que le deja en una situación muy comprometida.

1703w.png

Antes de que el ejercito de Mahtar cierre definitivamente el cerco sobre la ciudad y la someta a asedio, los cristianos envian un mensajero en direccion a Capua para solicitar el auxilio, una vez mas, del ejercito papal. El fuerte ejercito bajo las enseñas papales, que se compone de más de cinco mil efectivos, se dirige rapidamente a socorrer a los cruzados occitanos encerrados en Amalfi, llegando pocos dias despues de la festividad de reyes de 1092. Tras un duro enfrentamiento con el ejercito de Mahtar, en el que dos tercios de los hombres del ejercito infiel terminan perdiendo la vida, los musulmanes deben levantar el asedio y huyen en desbandada hacia el sur.

1704.png

Aunque la situación militar occitana ha mejorado tras esta batalla, la salud del duque empeora día a día comenzando a tener problemas para respirar y a escupir sangre. Los físicos del duque son muy pesimistas con la salud del joven Guilhem y temen que fallezca, tal como sucediese con su padre, en medio de una conquista en tierra extraña, por lo que le recomiendan encarecidamente que vuelva a Provenza para recuperarse, algo que el duque no está dispuesto a hacer.

1705.png

Por suerte, a finales de enero, la situación mejora. No se han recibido más ataques musulmanes y la salud de Guilhem comienza a mejorar, por lo menos deja de escupir sangre y respira mejor. Poco a poco la tos, el dolor en el pecho y la fiebre van desapareciendo, aunque el duque aun se siente muy débil después de dos meses enfermo y es incapaz de caminar sin ayuda.

1706.png

Pero aunque no pueda salir todavía de su tienda de campaña, comienza a dictar órdenes para asegurar su posición en Salerno. Lo primero que hace es aprovechar las ventajas que le ofrece la muerte de su cuñado, el duque de Meissen. Este falleció el 1 de octubre de 1091 lisiado y mutilado tras participar en una de las guerras al lado del Káiser contra los herejes del norte. Su amante esposa Mathilde, hermana gemela de Guilhem de Provenza, aunque no dispone de unos rasgos muy interesantes (es glotona, cobarde, perezosa e imbécil) no tardó en casarse con Heinrich, el hijo y heredero del Sacro Imperio, con lo que ahora el duque de Provenza ha emparentado con la familia imperial. Por ello, y sin dilación, al mismo tiempo que ordena al canciller de Provenza que organice nuevas levas, envía mensajeros a los dos hijos del emperador para solicitarles ayuda en la conquista de Salerno.

El príncipe Stefan, canciller de Pisa y Gran Alcalde de Piombino, acepta inmediatamente enviar ayuda, mientras que Heinrich, el nuevo marido de Mathilde, por el momento le da largas.

1707.png

A finales de junio llegan a Salerno las nuevas levas de Provenza, 257 hombres que se unen a los más de 300 de que dispone el duque en la zona, con lo que se refuerza mucho su posición. Además cuenta con el apoyo de pequeños ejércitos de Carintia y de Pisa que se dirigen hacia Salerno para apoyar en la cruzada contra el sultán de África.

1708i.png

Con todo ello, dos años despues de que comenzase la cruzada, el duque Guilhem siente que está cerca de conseguir la conquista de la provincia de Salerno aunque tiene que resolver algunos obstaculos como un nuevo ejercito que envia el sultan a finales de julio. Aunque en esta ocasión el duque de provenza vuelve a contar con la ayuda del ejercito papal que destroza facilmente a los infieles.

1709.png

Los restos del ejercito musulman huyen en direccion norte hacia Napoles donde intentan levantar a la población en armas contra el Papa. En diciembre los esfuerzos dan su fruto y se producen revueltas en Napoles y Sorrento, ciudades bajo la ocupacion del ejercito liderado por el Santo Padre. Este solicita a Guilhem que se encargue de sofocar la revuelta y el duque, ya recuperado de su enfermedad y honrado por haber recibido este encargo de manos del Papa, envia hacia el norte un pequeño contingente que se encargue de acabar con los revoltosos, algo que consiguen sin necesidad de gran esfuerzo.

1710y.png

A principios del año de gracia de 1093 el duque ya es virtual señor de la provincia de Salerno, con sus principales ciudades ocupadas y sin resistencia a su dominio, donde los pequeños conatos son fácilmente sofocados. Pero es entonces, a principios de marzo, cuando llega una mala noticia desde Provenza. Ponç de Castellane, Conde de Menorca, que fuera Regente, tutor del duque y que ha ejercido el puesto de canciller con tres duques diferentes, ha fallecido a los 62 años, pocos meses después de la muerte de su esposa, Judita Presmyl.

1711.png

Según el mensajero, el anciano conde fue encontrado solo una semana antes desvanecido en uno de los pasillos del castillo de arles. Aunque respiraba no respondía a las preguntas ni parecía darse cuenta que nada de lo que sucedía a su alrededor. Tras una semana en cama sin que se produjese mejoría alguna, su respiración comenzó a hacerse más lenta y trabajosa hasta que expiró el 24 de febrero, dejando al ducado huérfano de uno de sus mejores funcionarios y al duque sin unos de sus más leales y eficaces colaboradores.
 
ponç era un buen hombre y un gran estadista ¿a quien pondras para remplazarlo?