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Kurt_Steiner

Katalaanse Burger en Terroriste
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Feb 12, 2005
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  • Arsenal of Democracy
  • For The Glory
  • Victoria: Revolutions
  • Crusader Kings Complete
Érase una vez...

Buenas, soy Kurt, de los Steiner de toda la vida, un viejuno del lugar que aterrizó por estos lares en 2005 y que recuerda esta sección cuando los AARs brotaban como churros de la mano de genios como el tito Obelixeke, Silas, Fiehru y Cayus Bonus, entre muchos otros. Este humilde servidor de usted, querido lector, fue testigo de aquellos míticos tiempos en los que el foro se iba al cuerno cuando Johann conectaba su cafetera, en el que los foreros se linchaban alegremente en Villalobos, cuando los paradoxeros hispanos y muy hispanos invadieron el foro hereje al grito de "Fulgencio y cierra España!" a repartir spam del bueno, ganándose el apodo de Spamiards desde entonces y pa' los restos, época aquella de los Jrandes Jilos Húnicos, que colapsaban el OT, donde los baneos iban y venían cuando los humores se calentaban y decíamos lo que nos salía de los mismísimos teclados. Ah, que tiempos aquellos, qué risas, qué jolgorio, que bien lo pasemos, que diría el ínclito profesor de español en el extranjero...

Han pasado seis años desde mi último AAR y unos trece desde el primero. A estas alturas, con medio siglo cumplido en marzo y canas más blancas que el culo del difunto Copito de Nieve, considero que es una descortesía por mi parte tener tan descuidada esta sección, por lo que me propongo recuperar algo de aquellos clásicos tiempos en los que el HOI2 colapsaba esta sección junto con los Cruasanes Kings, los EU2 y algún masoquista que se dedicaba a sufrir con el Victoria y sus núcleos poblaciones. Que la Fuerza de las Bananas me acompañe en este intento.

No tengo los humores de antaño, pero supongo que algo queda. Así que ahí va esto.

Crusader Kings, Deus Vult

Hasting, 1066.

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Capítulo 1. Harold III “Hardrade”

Harold III, conocido por sus contemporáneos como Harald Hardrade o "literalmente, el que rige con dureza", fue uno de los grandes reyes guerreros vikingos de Inglaterra. Su historia la de un gran aventurero y conquistador. Nacido en 1015, según crónicas contemporáneas hijo de Sigurd Syr y Åsta Gudbrandsdatter, hija de Guðbrandr kúla Ólafsson, hersir de Oppland. Bisnieto de Harald Fairhair, medio hermano del rey Olaf II de Noruega, combatió por primera vez a la edad de 15 años. Después de que Olaf perdiera su corona a manos de Cnut "El Grande", Hardrada luchó para restaurarlo en el trono. La Batalla de Stiklestad terminó con la derrota de y muerte de Olaf, lo que obligó al joven príncipe a exiliarse.

Harald pasaría la mayor parte de su juventud en el este, sirviendo como mercenario para Rus y más tarde con la Guardia Varangian al servicio bizantino, dejando un legado de grandes hazañas por el Mediterráneo: participó en 18 batallas, luchando contra árabes en Anatolia y en Sicilia y acumuló una gran cantidad de riquezas,. Durante este tiempo se involucró por primera vez en la política, las intrigas y maquinaciones de Constantinopla. Sin embargo, lo que es más importante, se ganó la reputación de comandante talentoso pero severo, un guerrero brutal y un hombre de hierro. Harald regresó a Noruega en 1046 y, aliándose con el rey Sweyn II de Dinamarca, derrocó victoriosamente a los descendientes de Cnut. Por un breve tiempo compartió el trono con su sobrino, Magnus I. Un año más tarde murió Magnus y Harald quedó como gobernante en solitario. Durante las siguientes dos décadas, se centró en reformar y consolidar Noruega en una nación unida y más compuesta. A pesar de la fuerte oposición interna, sofocó la autonomía de los señores rebeldes y autónomos, convirtiéndose en el rey noruego más poderoso hasta ese momento. Exploró el norte de su reino, adentrándose en el círculo polar ártico y al este hacia las tierras finlandesas.

En 1066, tras la muerte de Eduardo el Confesor y con la Casa de Wessex perdiendo el control de la corona inglesa, Harold Godwinson fue el primero en apoderarse del trono. El difunto rey Eduardo había mantenido la estabilidad y la independencia de Inglaterra en gran parte prometiendo la corona a un buen número de candidatos a sucederlo. Harold era hijo de Godwin (c. 1001-1053), el poderoso conde de Wessex, y de Gytha Thorkelsdóttir, cuyo hermano Ulf el conde estaba casado con Estrid Svendsdatter (c. 1015/1016), la hija del rey Sweyn Forkbeard[ y hermana del rey Canuto el Grande de Inglaterra y Dinamarca. El trono inglés, en lugar de seguir una línea estricta de herencia de primogenitura, a menudo pasaba de hombre a hombre por acuerdo y tratado, a menudo con la aprobación del Witanegamot, un consejo consultivo de nobles anglosajones. Godwinson, líder de facto de los muchos hijos poderosos de la dinastía Godwin, fue uno de estos hombres y fue coronado como Harold II de Inglaterra en la Abadía de Westminster en Londres. Otro contendiente fue William; “De Normandía” para sus amigos, “el Bastardo” para todos los demás. El duque normando era un comandante capaz y de ingenio astuto y tenía dignidades en el trono inglés. A Harald, rey de Noruega durante más de 20 años, no se le había prometido el trono. De hecho, mientras que la conquista de Inglaterra había pasado por su mente muchas veces, fue Dinamarca lo que vio como el verdadero objetivo y una serie de invasiones fallidas lo dejaron escarmentado y frustrado.

Harald tenía una reclamación basada en un pacto acordado una una generación antes, Halfcnut (un hijo del odiado Cnut el Grande) había acordado con el hermano mayor de Harald, Magnus; el acuerdo establecía que si uno de los dos moría, el otro heredaría sus tierras Tras la muerte de Halfcnut, fue el medio hermano sajón del difunto rey, Eduardo el Confesor, quien se hizo con el trono. Esto le dio a Hardrada el derecho suficiente para considerar una expedición al oeste, pero se necesitaría la incitación de un solo hombre para empujarlo a la invasión.

Tostig Godwinson fue quizás el más difamado de esa gran dinastía. Hermano menor de Harold y que fuera conde de Northumbria, fue uno de los hombres más poderosos del reino. Sin embargo, Tostig y Harold se habían peleado y una combinación de pasos en falso en la política y la desconfianza en el Tostig del sur por parte de los lugareños del norte hizo que una alianza improvisada de Harold y los thegns locales despojaran a Tostig del poder y lo exiliaran al extranjero. Tostig, furioso y amargado, buscó alianzas para vengarse de su hermano. Al llegar a la corte de Hardrada a fines de 1065, los dos llegaron a una alianza lógica. Buscando una oportunidad para atacar, Hardrada saltó ante el apoyo de Tostig y los dos comenzaron a conspirar en serio. En marzo o abril de 1066, Harald comenzó a reunir su flota en Solund, en Sognefjord, completando sus preparativos a principios de septiembre de 1066. Antes de salir de Noruega, hizo proclamar a Magnus rey de Noruega. En el camino, se detuvo en las islas de Shetland y Orkney, controladas por Noruega, donde reunió tropas adicionales, incluidos Paul y Erlend Thorfinnsson, los condes de Orkney. En Dunfermline, conoció al aliado de Tostig, Malcolm III de Escocia, quien le dio alrededor de 2.000 soldados escoceses. y Tostig prometió el apoyo de otros 3.000 ingleses tan pronto como desembarcaran.

Al llegar a Inglaterra en junio de 1066, Haardrada acampó no muy lejos de Yorvik y despachó fácilmente un pequeño ejército inglés formado principalmente por hombres de Northumbia. Marchó rápidamente hacia el oeste y, aunque esperaba una fuerte resistencia, no encontró un gran ejército. Extrañamente, tanto Morcar, conde de Northumbria, como su hermano Edwin, conde de Mercia, permanecieron pasivos ante el avance nórdico. Así Yorvik fue capturada en un asalto breve pero sangriento, llevándose a cabo primera de dos ceremonias para coronar a Haardrada en York Minster. Hardrada fue coronado confusamente como "Harold II, rey de los ingleses", aunque la mayoría de los historiadores modernos lo distinguen como Harold / Harald III para distinguirlo de Godwinson e igualar la numeración de los reyes ingleses y noruegoa. Con esto, se ganó el apoyo de algunos ingleses del norte, quienes fueron ganados por sus promesas de respetar y defender su cultura, más influenciada por los nórdicos, y hasta 3.000 de ellos se sumaran a sus fuerzas, que sumaban unos 19.000 hombres a mediados de julio de 1066.

En el sur, mientras tanto, se desarrollaba un gran drama. Temeroso de las maquinaciones vikingas, Guillermo de Normandía aceleró sus planes para invadir el país y partió de Francia en mayo. Desembarcando en Kent, el ejército de Guillermo era una mezcla de mercenarios, levas normandas y un puñado de seguidores ingleses. Su gran ventaja estaba en la caballería, algo de lo que carecían tanto los ingleses como los vikingos. Las estimaciones modernas sitúan la fuerza de este ejército normando en 10.000, aunque las predicciones varían de 5.000 a 12.000. Mientras tanto, Godwinson, habiendo reunido una gran hueste, tenía hasta 18.000 hombres y, desde Londres, se movió rápidamente para enfrentarse al invasor. Marchando hacia el sur, los dos ejércitos se enfrentaron en la ciudad de Cowden, en Kent. Encaramado en una colina local, Godwinson jugó a la defensiva y protegió su posición. Las cargas repetidas de la caballería normanda fueron costosas y agotadoras, y fallaron una y otra vez en romper el muro de escudos inglés. Una táctica de último minuto, informada por fuentes normandas como una retirada fingida y un intento de incitar a los ingleses a abandonar su posición, fue un fracaso y resultó en una estampida después de que varios comandantes normandos, incluido William, murieran en la retirada intentando reorganizer sus fuerzas. Con su duque muerto, el ejército se dispersó rápidamente y, aunque unos 3.000 hombres regresaron a Normandía bajo el mando de Alan el Rojo, la gran mayoría murieron. La batalla de Cowden fue una gran victoria para la Casa de Godwin, quizás su momento decisivo, y un golpe demoledor para los descendientes de Rollo, los duques de Normandía.

Sin embargo, la batalla no fue una victoria total, y Godwinson perdió a 2.000 hombres en combate, ya fueran muertos o gravemente heridos. Al regresar a Londres a fines de junio, se enteró casi de inmediato del desembarco de Hardrada y la captura de Yorvik. Al prepararse para partir a su encuentro, Harold II tuvo que hacer frente a la ira tanto de sus tropas como de los comandantes. Estaban cansados y agotados y la larga marcha hacia el norte sería agotadora. Sin embargo, el rey inglés se sintió obligado a retomar Yorvik y a desalojar al invasor, por lo que se dedicó en cuerpo y alma a enardecer los ánimos de sus soldados. Marchando a un ritmo vertiginoso, los ingleses se encontraron con los hombres del norte justo al norte de Nottingham. La batalla de Nottingham resultante es una de las más famosas de la historia inglesa. Dos grandes muros de escudos, reunidos en un campo abierto, chocaron durante muchas horas. Hardrada y Godwinson lucharon cerca del frente, si se cree en las Sagas, el propio Hardrada a hendió con su espada el cráneo de Harold, poniendo así fin a su breve reinado y a su vida. Ambos bandos perdieron hasta la mitad de sus hombres, pero la victoria de Harald parecía casi absoluta.

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Harold III de Inglaterra
(técnicamente, también era rey de Noruega,
pero opté por pasar la corona al segundo hijo
para evitar líos futuros y editar el save más de la cuenta)
 
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Capítulo 2. - Harold III “Hardrada" (1066-1071)
Casa de Hardrada

El nuevo rey de Inglaterra tenía 51 años al ser coronado en Winchester. No perdió el tiempo y se lanzó con rapidez a asegurar su gobierno. Si bien dejó claro que había conquistado la corona con su espada, también optó por no gobernar como un tirano extranjero. Harald mantuvo el Witan como institución y lo presionó para que lo reconociera como rey, lo que tuvo lugar en agosto de 1066. Se mantuvieron a todos los lores que juraron lealtad y solo se destituyó a los leales a Godwinson. Así Harald usó a menudo el dragón blanco anglosajón junto con su estandarte noruego, adoptando el símbolo inglés tradicional como propio. En la corte, el nórdico se usaba con regularidad, pero el inglés conservó su fuerza y Harald hizo un esfuerzo por aprender el idioma, aunque el noruego siempre siguió siendo su primera lengua. Su gobierno fue duro pero justo en términos generales. Cualquier atisbo de rebelión fue aplastado rápida y duramente y, como había hecho en Noruega, tomó algunas medidas para frenar el poder de la nobleza y aumentar el suyo propio. Construyó una pequeña serie de castillos en muchas ciudades inglesas, de los cuales un puñado sobrevive hoy. Los más impresionantes de estos, en ese momento, fueron el castillo de Westminster y el de Winchester y el Gran Fuerte de Yorvik.

La muerte de su esposa en 1067 le dejó abierto al matrimonio, aprovechando la oportunidad para casarse con la viuda de Godwinson, Aldgyth de Mercia. Aldgyth no solo fue una ex reina de Inglaterra, sino también una ex esposa de Gruffud, rey de los Dos Gales, así como hija del conde de Mercia. El matrimonio fue ventajoso y demostró a muchos que Harald estaba, contra todo pronóstico, comprometido a gobernar Inglaterra en serio, no simplemente a conquistarla y saquearla. El matrimonio tendría hijos, aunque su lugar en la historia no estaba asegurado de ninguna manera ya que los dos hijos mayores de Harald estaban ansiosos por reclamar sus tronos. Además de esta boda, Harald trabajó duro para integrar a muchos noruegos en la estructura de poder inglesa. A todo esto, los hermanos Leocfricson, Morcar y Edwin, duques de Northumberland y Mercia respectivamente, que habían permanecido pasivos ante la invasión vikinga pero que, tras la muerte de Harold, se habían unido a Harald, permanecían como los nobles más poderoso de Inglaterra a cambio de doblar la rodilla; un trato endulzado por el matrimonio de Harald con Aldgyth. También eran, todo sea dicho, los menos de fiar y más ambiguos. Ello le costaría a Edwin la perdida del condado de Chester por su extraño papel en la rebelión de 1071 y que llevó al poderoso duque a ceder "voluntariamente" el condado como prueba de su lealtad a la corona.

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Los problemas a veces viene a pares...

Durante los diez años posteriores a su victoria, Harald trabajó sin descanso para cimentar su gobierno y preparar a Inglaterra para una nueva generación de líderes noruegos. Así, el norte de Inglaterra proporcionó una sólida base de apoyo a Harald. Los anglo-daneses y anglo-nórdicos de la región habían desarrollado una cultura diferente de la anglosajona "pura" del sur. Muchos de estos anglodaneses recibieron puestos de gran importancia y en todo el país se animó a los señores ingleses a tomar esposas noruegas y viceversa. En muchos sentidos, sus medidas integralistas trabajaron para "norsificar" la vida inglesa, una política que cambió permanentemente el idioma y la cultura inglesa durante los siglos venideros. A corto plazo, logró en gran medida someter a Inglaterra y establecer un período de estabilidad y paz.

Aunque no abandonó su viejo proyecto de conquistar de Dinamarca y culminar su venganza contra Cnut, Hardrada no tuvo demasiada suerte al respecto; durante los 13 años de su gobierno, varias rebeliones, dificultades administrativas y la fuerza continua del rey Sweyn II de Dinamarca hicieron que tal empresa fuera imposible. En 1074 se consideró seriamente una conquista, pero la avanzada edad de Harald la hizo imposible. 1066 sería su última campaña.

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Durante el reinado de Harald, Svend iba a demostrar su extrema suerte
al esquivar complots y dagas asesinas una y otra vez.

Sin embargo, esto no significa que Harald abandonara sus ambiciones militares. Un intento de crear una armada permanente, parte de sus planes para invadir Dinamarca, fracasó por su elevado coste y otros problemas mas acuciantes socavaron el proyecto. Más exitosa fue la expansión y formalización de los tradicionales guardaespaldas reales, los Huscarl, que pasaron de ser un grupo informal de sirvientes militares a una fuerza militar organizada y permanente. Cinco mil hombres, en su mayoría anglodaneses y otros norteños, fueron reclutados para los Royal Huscarls de Harald, una institución de la corona y que se convirtió en un ejército personal. Fueron movilizados tres veces para aplastar la rebelión que surgió una vez en Cornualles en 1069 y luego dos más en Wessex contra los leales a Godwinson en 1071 y 1073. Sin embargo, durante los últimos seis años de su reinado, el Harald estuvo en paz y hasta cierto punto prosperó. Las cosechas fueron burnas, el comercio en exitoso y las sorprendentes buenas relacione con el rey Malcolm de Escocia impidieron que se produjeran guerra alguna en suelo británico. El rey Harald permaneció en Inglaterra durante los primeros cuatro años de su reinado, estableciéndose principalmente en Winchester (para vigilar al sur rebelde), pero a menudo viajaba a Yorvik, la capital de facto. De 1069 a 1070, regresó a Noruega para asegurar la estabilidad en su reino natal y , a su regreso, se instaló en un hogar permanente en Winchester.

Para un gran rey guerrero como Harald, su muerte fue quizás la parte menos interesante de su historia. A los 56 años, después de una noche de copas con sus hijos, Harald se acostó y nunca se despertó. Los historiadores modernos sospechan que la causa fue un derrame cerebral o una embolia pulmonar. Dejaba el monarca una nueva era de reyes ingleses, y cambió el destino de esa isla para siempre.

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Harald III de Noruega (1046-1071) e Inglaterra (1066-1071)
 
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Capítulo 3. - Magnus “Lawgiver" (1071-????) -1-

Casa de Hardrada

Que la conquista de 1066 remodelara permanentemente a Inglaterra como nación y a los ingleses como cultura nunca fue una inevitabilidad histórica. Pero para ello se necesitaría un gobernante talentoso y dedicado para dejar una marca permanente en la nación.

Fue Magnus I, más que su padre, quien inició en serio la gran transformación de Inglaterra. Nacido en Noruega antes de la conquista de padres noruegos, Magnus había vivido en Inglaterra desde la conquista, viviendo con su padre en el castillo de Witcancaester cuando era joven, por lo que desarrolló un cariño por su nuevo hogar. Hardrada nunca resolvió formalmente la cuestión de la herencia antes de su muerte, aunque en todos sus reinos se entendió que Magnus, como el mayor, asumiría el trono noruego como Magnus III. Entre sus hijos menores, Olaf y Sigmund, fue el primero quien inicialmente parecía más preparado para tomar Inglaterra, aunque muchos historiadores ahora creen que Harald esperaba que uno de sus hijos heredara y consolidara todos sus reinos bajo una sola bandera. En cualquier caso, la muerte de Sigmund (ya sea por una enfermedad o por envenenamiento) en 1068 cambió repentinamente la mente de Hardrada; para Olaf sería el trono noruego. y para Magnus el inglés Olaf era conocido como un hombre pacífico y, aunque era un guerrero talentoso, había dejado en claro durante muchos años su oposición a una mayor expansión, prefiriendo en cambio concentrarse en reformar Noruega y resolver sus conflictos internos. Además, declaró públicamente su deseo de gobernar Noruega y solo Noruega, para gran decepción de su padre.

Tras la muerte de Harald en 1071, Olaf previsiblemente se concentró en asegurar Noruega y, en una carta conservada y mencionada en la Crónica de Hardrada, prometió "que dos coronas no se asentarían fácilmente en mi cabeza". El Witenagemot se reunió en Wintanceastre (ahora firmemente establecida como la capital de Inglaterra) en mayo de 1071 y, a pesar de cierta disidencia, respaldó la candidatura de Magnus de manera casi unánime. El joven fue coronado en la Abadía de Westminster por el arzobispo de Canterbury, y no perdió el tiempo, emprendiendo una importante reorganización del país a las pocas semanas de su ascensión al trono. Los partidarios de Harold Godwinson, faltos de candidatos fuertes entre su familia (la gran mayoría había muerto en la Guerra de los Tres Reyes), no pudieron oponerse a la coronación, aunque los conspiradores anti-Hardrada recurrieron a Edgar Ætheling como un candidato alternativo con la intención de izar la bandera de la rebelión en enero de 1072. Sin embargo, el complot se descubrió cuando el conde de Mercia, Leofric Edwinson, rechazó una invitación para unirse y expuso a los conspiradores, que fueron detenidos y ejecutados. Edgar permaneció ignorante del asunto hasta su conclusión y vivió el resto de sus días exiliado pacíficamente, primero en Escocia, luego en Italia y finalmente en Jerusalén. Con el único intento convincente de destronarlo finiquitado antes de poder comenzar, Magnus comenzó su reinado con una oposición interna sorprendentemente pequeña.

Así Magnus dedicó su primera década en el trono a reformar su reino, mejorando su economía y su capacidad militar mediante una serie de reformas que encontraron cierta oposición entre los perplejos nobles anglosajones y cierta incomodidad entre los noruegos. Unos por considerar "extranjeras" las medidas y los otros por verlas "timidas". El rey, haciendo equilibrios entre unos y otros, también desesperó con la lentitud de los cambios pero, sabedor de que no podía hacer mucho más, no tuvo más remedio que aceptar lo inevitable. Irónicamente, mientras Morcar, conde de Northumbria, apoyaba las reformas reales, su hermano Edwin, conde de Mercia, fue uno de los opositores que dejaron más clara su posición, lo que dañó irreversiblemente sus relaciones con el rey. Otro motivo de enfado real fueron sus baldíos intentos de mejorar las relaciones con el rey Malcolm de Escocia, que, educadamente, ignoró todas las propuestas diplomáticas de Magnus, que comenzó a considerar la opción de lanzar una expedición punitiva contra el norte.

Pero antes la frontera con Gales iba a reclamar su atención. Rhys ap Tewdwr, rey de Deheubarth, había sido otro de los que había hecho oidos sordos a las propuestas de Magnus. A partir de 1073 se produjeron diversos choques armados en la frontera cuando algunos clanes galeses retomaron sus viejas costumbres y comenzaron a lanzar ataques de saqueo contra los señoríos ingleses cercanos. Las protestas de Magnus no sirvieron de gran cosa aunque los ataques cesaron hacia el invierno de 1074. Se repetirían de manera casi constante entre 1076 y 1080 con la llegada del buen tiempo, lo que llevaría a Magnus primero a reforzar las defensas fronterizas y luego a preparar una invasión de Gales. Para cuando Rhys reaccionó y quiso hacer las paces con Magnus, éste había decidido que el galés iba a pagar los platos rotos tanto propios como escoceses. Aún así la guerra no comenzaría hasta 1084, cuando, a la cabeza de un gran ejército, invadió Gwent. Comenzaba la primera guerra galesa.

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Capítulo 4. - Magnus “Lawgiver" (1071-????) -2-

Casa de Hardrada

El 13 de enero de 1084 los clanes galeses de Gwent se llevaron una tunda considerable a manos de Magnus I Haraldsson. Los anglovikingos cargaron y lo que vino a continuación fue una masacre que Magnus dejó correr para dejar claro a sus enemigos que enfrentarse a él era una pésima idea. El 28 la última resistencia galesa cesaba en Gwent y procedía hacia Glamorgan. A partir de este punto la campaña comenzó a alargarse, pues Magnus optó por dejar claro que, ante cualquier resistencia, no pensaba dejar títere con cabeza. Así, la campaña se prolongaría hasta finales de año, hasta que Glamorgan se rindió el 16 de febrero de ese mismo año.

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Mientras estaba en campaña llegaron noticias para su familia. Su sobrino, el rey Lodin de Noruega, había aceptado dar la mano de Gyda Yngling en matrimonio al hermano bastardo de Magnus, Olaf, quien, por algún motivo que se escapaba al monarca inglés, había conseguido alcanzar la madurez, a pesar de las ganas de mucha gente en verlo muerto, Magnus entre ellos. Ahora, sin embargo, tenía planes para él.

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Finalmente, el 6 de marzo, tras la tradicional masacre de galeses, el duque de Deheubarth se rendía ante Magnus, que tomó su castillo y lo convirtió en su vasallo. La magninimidad del rey dejó perplejos a todos, pues se esperaban que colgaría al duque, por galés y por obstinado. En cambio, lo convirtió en uno de los suyos. Después de todo, dijo más adelante Magnus a su esposa, "me hace falta alguien de confianza para vigilar a esos galeses del demonio". Aún habrían de pasar par de años antes de que pudiera acabar la conquista de Gales.

En tareas de gobierno, volviendo al reino en general, Magnus era justo y respetuoso. Tranquilo y reflexivo (aunque los galeses pudieran dudar de lo primero), se comprometió a respetar los poderes tradicionales del Witan y los cumplió, consultando regularmente con ellos y desarrollando una relación firme con muchos de los principales señores ingleses. Para los lectores no académicos, pido disculpas por la serie de títulos, nombres, leyes e instituciones que siguen; si Sigmund fue algo, fue un hombre de letras y puede ser difícil hacer un seguimiento de sus muchas creaciones. Sigmund trabajó para ganarse la lealtad de los condes y establecer un nuevo y poderoso cuerpo creando, en 1081, el Cyningesgemot (en inglés ) o Konungsmót (en parla nórdica). Un organismo más exclusivo y elitista que el Witenagemot, el Cyningesgemot incluía solo cinco hombres (los condes de Wessex, Northumbria, East Anglia y Mercia, así como el arzobispo de Canterbury) a quienes se les pidió expresamente que asesoraran y dieran su opinión sobre la gobernanza. del reino. Esta institución fue bien recibida, en particular por parte del conde de Northumbria, Morcar, más que anciano a esas alturas, quien demostró ser un aliado clave durante el reinado de Magnus hasta su muerte, que tuvo lugar un par de años después. Algunos señores menores del Witan se opusieron a esta reforma y a ser marginados, pero la mayoría la aceptó con solo una pequeña queja. Al respetar los derechos y privilegios tradicionales, Magnus ganó una lealtad instintiva durante los primeros años de su reinado que preparó el escenario para que se promulgaran sus reformas más radicales.
 
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Capítulo 4. - Magnus “Lawgiver" (1071-????) -3-

Casa de Hardrada

En el verano de 1087 Magnus inició su campaña final contra Gales. En junio se enfrentó con Maredud Cynfyn; su caballería decidió el combate. Magnus estaba aprendiendo con rapidez las ventajas de una fuerza montada, algo a lo que los vikingos no estaban acostumbrados. En este encuentro la usó a modo de martillo: mientras los peones de ambos bandos se enzarzaban en una violenta y breve refriega, la caballería anglovikinga cabalgó hasta situarse en uno de los flancos enemigos y entonces cargó. Los galeses, tras recibir el impacto de la carga, rompieron filas y huyeron, siendo perseguidos por un rato antes de que Magnus diera la batalla por concluida.

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Asediado en su fortaleza y sin posibilidad de ayuda o milagro, finalmente el duque de Gwynedd se vio forzado a rendirse tras un verano caluroso y poco propicio. Para su sorpresa, no sólo conservó su cabeza, sino también su ducado. Todo al precio de doblar la rodilla ante el monarca anglovikingo. Así evitaba Magnus el peligro de que Gales se pudiera unir contra él. Aún así, los principales miembros de la familia real fueron tomados como rehenes, junto con algunos de los señores menores, y abandonaron Gales cuando Magnus regresó a su corte.

La conquista galesa dio nuevos ánimos al rey, lo que culminaría, en septiembre de 1088, de Snofrid, la primera de las cuatro hijas que le daría su segunda esposa, Helena, aunque la última se iría a la tumba, arrastrando consigo a su madre en 1091.

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Pronto, dos eventos acontecidos lejos de las cosas británicas iban a transformar el reinado de Magnus y el destino de sus súbditos.
 
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Capítulo 5. - Magnus “Lawgiver" (1071-????) -4-

Casa de Hardrada

En 1092 una noticia asombrosa dejó a Magnus y a sus cortesanos sin habla. Aprovechando una debilidad aparentemente temporal de los musulmanes,en 1089 el rey Enrique I de Castilla había aprovechado que su cabeza reunía las coronas leones y castellana para lanzar un ataque contra Toledo. Eso había puesto en curso un extraño río de acontecimientos cuando los musulmanes arrollaron a los castellanos y llegaron incluso a bañar sus pies en el Cantábrico. El contraataque francés había terminado con un conde franco sentado en Zaragoza y un enfurecido Enrique I. que cortó la cabeza al conde de Santillana y redujo a cadenas a otros que no habían mostrado el suficiente ardor combativo. Y lo intentó de nuevo en 1090. Y, par sorpresa de todos, los musulmanes se desmoronaron. A finales de 1093 eran los castellanos los que bañaban sus pies en las playas andaluzas. Por su parte, Enrique seguía airado lo que le ganaría el apodo de Enrique el Furioso,. La presencia de franceses en Zaragoza y en Pamplona le resultaba particularmente penoso, sobre todo porque había permitido a los catalanes de Pedro de Barcelona avanzar hasta Albarracín y más allá,. Por eso se había apresurado a tomar Castellón de la Plana para el avance catalán hacia el sur.

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Magnus empezó a considerar entonces la idea de usar una unificada Hispania como base para reconquistar Jerusalén. Para sorpresa suya, Enrique resultó, además de ser furioso, algo temperamental y quisquilloso, y había eludido magistralmente los intentos anglovikingos de formar una alianza. Así las cosas, Magnus concibió una idea: conquistar las tierras portuguesas y andaluzas en manos musulmanas para usarlas como punto de partida para su gran proyecto cruzado.

Tenía prisa, pues había escuchado rumores que apuntaban a una posible cruzada francesa. De repente, Magnus entendía muy bien por qué Enrique de Castilla tenía esa ojeriza a los galos...
 
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Capítulo 6. - Magnus “Lawgiver" (1071-????) -5-

Casa de Hardrada

El 20 de junio 1098 el rey Erik Röde (Eric el Rojo) de Suecia quiso quitarse de encima la influencia anglovikinga en Escandinavia. Magnus no se tomó la guerra demasiado en serio al principio y no concentró sus fuerzas hasta septiembre. La llegada a Escandinavia se demoró hasta marzo de 1093, cuando las fuerzas combinadas anglovikingas y mercenarias comenzaron a desembarcar en los fiordos noruegos.

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Para entonces la situación del aliado noruego de Magnus era algo apurada, pero Magnus, que tenía bajo su mando un ejército generosamente poblado de vikingos ingleses y de anglosajones ansiosos de probar sangre enemiga, estaba muy seguro de sus posibilidades cuando se puso en marcha para romper el cerco de una de las ciudades de su aliado. A tenor de las crónicas de uno de sus caudillos, Ealdwrith Husting, Magnus estaba absolutamente seguro de sus posibilidades de victoria, lo que se contagió por todos los rincones del ejército. Husting, que se confiesa algo escéptico ante tanta seguridad real, va narrando con creciente aprensión la marcha del ejército real en pos de sus enemiogos.

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El 10 de septiembre de 1099 los dos bandos se enfrentaron en el campo de batalla. De repente, y con un grito imposible de describir, los anglovikingos cargaron contra las líneas suecas que, simplemente ante semejante brutalidad, se vinieron abajo tras una hora de violentos combates. Lo que siguió, fue, simplemente, la consabida limpieza que los ejércitos vencedores realizan con los enemigos en fuga.

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Aún así, no sería hasta el 14 de octubre cuando Erik ofreció pagar una pequeña compensación a su rival noruego y en devolver todo lo conquistado. Lo quemado permanecería quemado y los noruegos se morían de ganas por vengarse, pero Magnus tenía prisa por volver a su isla y a sus reformas y consiguió convencer a los jarls de que lo mejor que podían hacer era aceptar el oro sueco.

Así terminó la excursión sueca de Magnus.
 
Después de este inesperado y grato retorno, me veo obligado a bastardizar a Churchill para citarte esto:
I, whose youth was passed in the august, unchallenged and tranquil glories of the great AAR era, may well feel a thrill in invoking once more the prayer and the anthem: “Me suscribo”.
 
Después de este inesperado y grato retorno, me veo obligado a bastardizar a Churchill para citarte esto:
Oiiiiiiiiiii,

El Winnieeeeeeeeeeeee.... que tienno...

Bueno, aprovecho este momento para decir que, en cuanto se acaben los calores, este AAR volverá a la vida. Tengo planeado comenzar a darle otra vez en septiembre, que agosto me ha sentado como el ojete...
 
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Capítulo 7 - Magnus “Lawgiver" (1071-????) -6-

Casa de Hardrada

Económicamente, Magnus también buscó reformar y reorganizar. El tradicional y a veces ineficaz sistema de cambios o pagos en especie posrromano sería sustituido por una nueva moneda. Los nuevos denarios, acuñados por primera vez en 1101, todavía se basaban en la tradición romana, pero estaban acuñados en plata, llevaban el rostro de Magnus, la Cruz de Cristo y el Dragón Blanco de la corona inglesa, un símbolo que el rey había llegado a abrazar por completo. (y por puro instinto táctico para ganarse a los anglosajones). La nueva moneda rápidamente ganó muchos apodos; Wyverns por los dragones que llevaban, Sigmunds por el rey que los forjó por primera vez, "Norskoin" o "Norsk Coin" eran comunes entre los pocos ingleses que obstinadamente se negaban a aceptar el nuevo orden y se encastillaban en la defensa de su vieja lengua anglosajona. Esta nueva moneda fue un éxito modesto, permitiendo un ligero aumento en el comercio y normalizando el comercio interno, que ayudaría a nular las diferencias entre condados. Los historiadores generalmente observan que la moneda supuso poca diferencia en el gran esquema de las cosas, pero sí proporcionó un pequeño impulso económico y ayudó a reforzar la posición de la nueva dinastía real; el Dragón Blanco se convirtió en *el* símbolo de la dinastía Hardrada tanto como lo era de Inglaterra. La propia dinastía se vio aún más fortalecida por el tercero de los importantes nombramientos cortesanos de Magnus,. El papel de Ealdwritere, el historiador tradicional de la corte inglesa, lo desempeñó por primera vez Cerdic, un escriba inglés que anteriormente había servido al padre de Magnus. El trabajo de Cerdic, continuado por sus sucesores, se conoció como la Crónica de Hardrada, una de las obras más importantes de las Grandes Crónicas que tratan sobre la historia temprana de Inglaterra. Cerdic fue eficaz y, hasta el día de su muerte, sirvió lealmente y bien: retrató a Sigmund bajo una luz positiva pero nunca se alejó demasiado de la realidad como para perder credibilidad o un sentido oficial de legitimidad. La Crónica ha sobrevivido casi en su totalidad hasta el presente y es una herramienta clave para los historiadores de esa época. Lo más interesante de todo es que es en la crónica donde vemos algunos de los primeros indicios de la Ængilsk moderna. Producido tanto en anglish como en nórdico (lo que lo hizo accesible a todos, demostró que Sigmund se dedicaba a gobernar en nombre de Inglaterra pero mantenía la autoridad de los nuevos aristócratas nórdicos en todo el país) condujo a una cierta mezcla de los dos ya en 1101. Muy temprano, las palabras comenzaron a tomarse prestadas o fusionarse, lo que no fue una tarea difícil dada la similitud básica de los dos idiomas. La gramática fue alineándose lentamente y las letras “ø” y “œ” comienzan a aparecer en los textos en inglés, mientras que el uso en inglés de “y” como consonante aparece en el nórdico. Magnus nunca forzó una integración cultural, pero su liderazgo pragmático y reformista sí la fomentó.

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En el gobierno, Magnus era pragmático, justo y respetuoso y se comprometió a respetar los poderes tradicionales del Witan. cumpliendo con su empeño. consultándolos periódicamente y desarrollando una relación firme con muchos de los principales señores ingleses. Magnus trabajó duro para ganarse la lealtad de los condes y establecer un nuevo organismo poderoso creando, en 1081, el Cyningesgemot (Enlglisc) o Konungsmót (nórdico). El Cyningesgemot, un organismo más exclusivo y elitista que el Witenagemot, incluía sólo a cinco hombres (los condes de Wessex, Northumbria, East Anglia y Mercia, así como el arzobispo de Canterbury) para asesorar y opinar sobre la gobernanza. del reino. Esta medida fue bien recibida, particularmente por parte del conde de Northumbria, Skuli Tostigsson, quien resultó ser un aliado clave durante todo el reinado de Sigmund. Algunos señores menores del Witan se opusieron a esta reforma y a ser marginados, pero la mayoría la aceptó con sólo una pequeña queja. Al respetar los derechos y privilegios tradicionales, Sigmund se ganó una lealtad instintiva durante los primeros años de su reinado que preparó el escenario para la promulgación de reformas más radicales.

Magnus era muy consciente de que Inglaterra era una nación grande y dividida, con muchas regiones y subculturas únicas. Por ello creó, en 1084, un Hiwiscahawere para aumentar la gobernabilidad de su reino. El primer censo real tardó una década en completarse, pero registró con éxito todos los pueblos, ciudades y condados del reino. La división en unidades administrativas conocidas como “Hides” de 120 acres y con un ingreso de una libra de plata proporcionó un fuerte componente económico a su investigación, lo que permitió una distribución de impuestos más sensata y organizada. Los ingresos aumentaron, al igual que la capacidad de la Corona para ejercer poder en todo el Reino, pero en general los diezmos se distribuyeron de manera más justa que antes y las reformas agradaron a gran parte del campesinado y los pequeños señores de Inglaterra. Lo que tal vez sea más importante recordar y qué le valió al Magnus el título de “Lawgiver" o Legislador. Creó un sistema legalista escalonado en el que se abolieron las grandes diferencias incluso entre los condados vecinos en favor de un conjunto uniforme de reglas y procedimientos. Los líderes locales y tradicionales conservaban el derecho de tomar la primera decisión, pero estas sentencias legales podían apelarse ante los tridinges-hustings, los tribunales locales, lo que permitía a los súbditos ingleses presentar su caso ante el señor local. Además, en 1090, el rey nombró un Aldor-Déma o Juez Supremo para supervisar un Hár-Husting, en la práctica el primer Tribunal Supremo de Inglaterra. Las decisiones tomadas por los tridinges-hustings podían ser apeladas hasta esta Hár-Husting, lo que dio a Inglaterra uno de los sistemas legales más complejos y mejor desarrollados de Europa en ese momento. Durante las décadas de 1080 y 1090, algunos jueces locales se ofendieron por estas nuevas reglas y la relativa complejidad y la nueva burocracia extensa requerida para administrarlos hicieron que la implementación fuera un asunto arduo. Sin embargo, en 1095, el sistema se había implementado por completo y ya comenzaba a ser muy apreciado tanto por los campesinos como por los señores. Respetar los sistemas tradicionales pero evolucionarlos y ampliarlos era el estilo de Magnus y, aunque inyectó algunos pequeños elementos de la cultura nórdica y su legalismo en este sistema, en su mayoría conservó las tradiciones y filosofías de la Inglaterra pre-conquista. Después de pasar los últimos años del siglo XI creando instituciones, en sus últimos años Magnus también aprobó muchas leyes propias. Estas incluían reformar la propiedad de la tierra, cambiar los castigos por asesinato o robo, proporcionar una mayor protección, simplificar las leyes de la herencia y el matrimonio, resolver disputas fronterizas tanto entre los condes como con Escocia, regular el comercio en las florecientes ciudades de Inglaterra; la cantidad de leyes requeriría un registro enciclopédico para conjeturarlas en su totalidad. Las reformas de Magnus fueron en ocasiones demasiado complejas y el rey se ganó la reputación de ser algo aburrido; conocido por preferir la compañía de la luz de las velas y la pluma más que sus amigos y una jarra de hidromiel. Sin embargo, pocos han hecho más para cambiar por sí solos las leyes de una nación y el Legislador transformó el sistema legal de Inglaterra de uno de los más inconsistentes e ilegibles de Europa al más organizado y avanzado.
 
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Capítulo 7 - Magnus “Lawgiver" (1071-1108) -7-

Casa de Hardrada

Después de 37 años en el trono, Magnus "el Hacedor de Leyes" falleció en Londres el 4 de septiembre de 1108. Tenía 59 años de edad y su largo reinado se había cobrado su precio. Después de varios días de dolores en las piernas, Magnus fue encontrado muerto en su lecho. La parca le sorprendió mientras dormía. A su lado, en la cama, una nota decía "reconquistar Jerusalén".


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Desaparecía el monarca que había consolidado el dominio de los Haardrada sobre Inglaterra. Muy respetado, aunque en sus últimos años había sufrido de una cierta avarícia que le había hecho esquilmar incluso a las piedras, dejaba el trono anglon-nórdico a su hijo. El país comenzaba a dar los primeros signos de unión, con los nobles hablando fluidamente nóridco y anglisc (el lenguaje de la mayoría de los habitantes de la isla, una fusión de la vieja lengua anglosajona y la nórdico que con el tiempo, daría paso al actual lengua inglesa o "Ængilsk"). Mantuvo la religión católica y reinó siguiendo el consejo del Witenagemot y del Cyningesgemot. Sus alianzas con Noruega (por lazos familiares) y con Escocia (por lazos matrimoniales) parecía asegurar una posición dominante inglesa en el norte de Europa.

Su sucesor era su hijo mayor, Halfdan, conde de Oxford, de 23 años de edad. Un gran soldado y un consumado diplomático, Halfdan, al que algunos llamaban "el Blanco", era un pésimo administrador, algo que su mujer intentó remediar con bastante fortuna durante sus tiempos como conde. Ahora, como rey, todos confiaban que su esposa le ayudara en tal menester.

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Moderadamente religioso, Halfdan tenía una gran habilidad para hacer amigos, pero era todavía mayor su capacidad para crearse enemigos debido a su peculiar sentido del humor. Pronto iba a sorprender a muchos con sus peculiares arranques temperamentales.

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