Clemente VII (1523-1534)
Problema resuelto, mi felonía para pillar espacio web sigue en pie y ahí sigue la historieta:
Tras la muerte de Adrián VI, es elegido como Papa un nuevo miembro de la familia de los Mediccis, Clemente VII, quien recibe la tiara el 16 d septiembre d 1523.
La primera medida del nuevo Pontífice es la ampliación de las murallas de Mantua (que había perdido con su independencia) con un elevado coste de 328 ducados, pero a los pocos días una nueva revuelta toma por sorpresa la ciudad y las obras de fortificación son abandonadas. Rebelión, por otra parte, ésta de Mantua que inicia el camino de una nueva oleada de revueltas, provocada por la guerra con el Palatinado y sus aliados. Clemente intenta abortar el riesgo negociando la Pax Cristiana con los palatinos, pero éstos se niegan en redondo. El 27 d enero d 1525 es, no obstante, tomada la ciudad de Mantua por el Ej. C.
El día 31 d marzo se produce la reforma de Lutero. En realidad es la segunda dieta de Nuremberg, ya que la primera ya se produjo hace unos años, pero con menor repercusión que ésta. Lutero es excomulgado por S.S., pero ya la semilla de la herejía anida en el corazón de los alemanes y pronto lo hará en el de casi toda la Cristiandad.
La primera ciudad en seguir el ejemplo de Mantua es Siena, que se rebela el 4. d noviembre. Los rebeldes serán vencidos el 10 d junio d 1526 por las tropas pontificias, pero con grandes pérdidas por parte de éstas.
El 11. d enero d 1526 se produce un nuevo escándalo en la corte d los Medicci, que ven reducidas sus aptitudes diplomáticas, pero la buena noticia es que, el 2 d marzo, Austria negocia la Paz con el Palatinado mediante el pago de 28 ducados.
El 29 d agosto los Habsburgo heredan Bohemia y, como ya anteriormente habían heredado Hungría, parece que se conviertan al fín en un aliado poderoso para el R.D.
Lo que sí es seguro es que seguirá siendo un aliado belicoso, ya que el 26 d noviembre los austriacos declaran la guerra a Croacia, sin aliados y vasalla de Venecia. S.S. suspira resignado y espera que al menos sea una campaña corta, pero antes de que acabe, el 9 d enero, Génova (apoyada por sus aliados: Venecia, Baviera, Estrasburgo, Sajonia y Würzburgo) declaran una impía guerra contra la nación elegida de Dios. Austria y España responden también ante la agresión, apoyando al R.D.
Tras una escaramuza en que los venecianos nos derrotan y expulsan de su capital. Seguidamente S.S. concerta una Pax Cristiana con Croacia y decide reagrupar todo el Ej. d C. (22/17) en Mantua, marchando a continuación sobre la Lombardía, donde exterminamos a 20 reg. de inf. genovesa y ponemos cerco a Milán. Como siempre la debilidad del R.D. radica en las rebeliones internas y el 1 d febrero d 1528 Siena vuelve a ser asediada por los sediciosos, agravándose la situación cuando Francia se incorpora a la alianza enemiga y nos declara la guerra el 3 d marzo.
Decidido Clemente a obligar a Génova a firmar la paz antes de que el ejército francés incline negativamente la balanza y, a sabiendas por las exploraciones de la A.D. que ningún ejército defiende Córcega (donde radica una apetecible fábrica de recursos navales), un cuerpo expedicionario del R.D. se apresta a la invasión de la isla.
Pero al no ser suficiente infantería para tomar la ciudad, la A.D. debe volver a por otros 7 reg. que aguardan en Roma. El 18 d junio tomamos Milán y avanzamos sobre Génova y Córcega, pero ya los rebeldes están a punto de tomar Siena, mientras que una flota española se acerca al golfo de Liguria. Asimismo en el Norte los austriacos asedian Innsbruck, pero están a punto de perder Istria a manos de Venecia.
Durante el asedio de Génova se desata una epidemia en la ciudad, muriendo el anterior Dogo y siendo elegido para el cargo Oberto Cattaneo (5/4/5) el 13 d octubre, menos de un mes después, la ciudad de Venus cae en manos de los rebeldes.
En enero de 1529 un ejército español, al mando del Duque de Alba desembarca en Génova, con la intención de aprovechar el trabajo del Ej. d C. Ante las murallas de la ciudad, mientras que los rebeldes sieneses asedian Roma, lo que obliga a S.S. a decretar nuevas levas en Nápoles y a aceptar la Paz que Génova ofrece, pagando 25 ducados y cediéndola Lombardía al R.D. (cuya reputación sigue siendo un tanto mala). España y el R.D. abandonan Córcega, pero Austria, que ha firmado varios tratados por su cuenta, sigue en guerra, habiendo arrebatado Innsbruck a Francia, pero perdiendo Salzburgo a manos de Baviera y Triestre, que ha sido tomada por Venecia
Los cardenales reprochan a S.S. el no haber aprovechado la campaña, en la que además no estaba habiendo excesivas rebeliones, para robar los mapas genoveses, pero S.S. argumenta que no quiere que la revuelta prenda en el ánimo de las independentistas ciudades de Italia, así que prefiere negociar una paz ventajosa y dedicarse a pacificar el R.D., pero el 26 d septiembre, mientras los soldados de Cristo luchan con los rebeldes a las puertas de Roma, el detestado Carlos I de Aragón nos declara la guerra, respondiendo nuestros aliados españoles y austriacos de la S.A. El 13 d octubre es Saboya (también sin aliados como Aragón) quien nos declara la guerra y marcha sobre la Lombardía, poniendo sitio a Milán. Por añadidura, el 2 d mayo los rebeldes nos arrebatan traicioneramente el control de Módenna y el Ej. d C. , tras tomar Siena, marcha sobre la Emilia en rebeldía, previamente a enfrentarse a los saboyanos.
Afortunadamente, en la Península Ibérica España destroza a los ejércitos aragoneses y Aragón nos propone una Paz en la que deberemos pagar 27 ducados. S.S acepta para concentrarse en el próximo castigo a Saboya, pero una revuelta en Florencia retrasa al Ej. d C lo suficiente para que Saboya tome Milán y comience el asedio de la rebelde Módenna, por lo que S.S. decide realizar nuevas levas (para lo que el Cardenal del Tesoro debe pedir un préstamo) y dividiendo la tropa en dos cuerpos de ejército ataca simultáneamente a los saboyanos en ambas provincias, el 31 d abril d 1531, mientras España asdia Turín y Austria, que ya ha firmado la paz con Francia devolviéndole el Tirol, lo pasa fatal ante bavaros, sajones y venecianos
Tras derrotar a los saboyanos en todos los frentes, Módenna es tomada al asalto por nuestras tropas el 30 d julio y ponemos sitio a Milán y Turín simultáneamente
A principios del año 1532, mientras son ya muchos los príncipes alemanes que se pasan a la herejía luterana y una alianza de Francia, Baviera, Estrasburgo y Génova declaran la guerra primero a Inglaterra y Portugal y luego a Aragón, Venecia se alía con Irlanda y se registra una nueva revuelta en la ciudad de Florencia. El 1 d agosto son los campesinos sieneses los que se levantan, pasando a cuchillo a la guarnición de la ciudad y tomando por sorpresa el control de la misma y marchando sobre Roma, donde son derrotados por 4/2 reg. pontificios recién levados. Inmediatamente se produce un levantamiento en la Marca, por lo que, tras tomar Milán el 2 d noviembre, S.S. ofrece una Pax Cristiana, sin vencedores ni vencidos, a Saboya, que acepta, para proceder a sofocar las numerosas revueltas que las incesantes guerras están produciendo en el R.D.
Hasta el 26 d febrero d 1534 no es sofocada la última rebelión de las que se van produciendo (y que no enumeramos en estas Crónicas por no aburrir a sus condescendientes lectores) por todo el R.D. hasta que en dicha fecha dejan de producirse gracias a los 16 meses que el R.D. lleva ya en paz, lo que ayuda a calmar los ánimos de sus exasperados súbditos. La sangría en tropas y ducados que se ha visto obligado a realizar el R.D. le ha dejado prácticamente extenuado. En no mejor situación ha quedado Austria, que no ha recuperado el Tirol y ha perdido Istria a manos de Venecia y Wurzburgo y una provincia checa que han pasado a manos de Sajonia. En el Este, mientras tanto, ya toda Anatolia ha sido unificada bajo el poder del Imperio Otomano, que asimismo ha expulsado de Rhodas a la Orden Hospitalaria.
Un mes después Francia firma la paz con Inglaterra mediante el pago de una cantidad simbólica (días después los rebeldes de la provincia inglesa de Gascoigne se pasan a Francia) y declara la guerra al palatinado y sus aliados, apenas unos días después el Palatinado, temeroso, calma las ambiciones francesas mediante el pago de 56 ducados. Asimismo Francia negocia la paz con el obstinado y belicoso Reino de Aragón pagándole 5 ducados.
El 20 d junio d 1534, S.S., agotado, no presta la suficiente atención a los asuntos de estado y el Tesoro ha de empeñarse automáticamente en un segundo préstamo, mientras que la inflación asciende ya al 70 %. Y 2 meses después Clemente VII muere en su cama devorado por unas fiebre que su exánime organismo no puede vencer.
Problema resuelto, mi felonía para pillar espacio web sigue en pie y ahí sigue la historieta:
Tras la muerte de Adrián VI, es elegido como Papa un nuevo miembro de la familia de los Mediccis, Clemente VII, quien recibe la tiara el 16 d septiembre d 1523.
La primera medida del nuevo Pontífice es la ampliación de las murallas de Mantua (que había perdido con su independencia) con un elevado coste de 328 ducados, pero a los pocos días una nueva revuelta toma por sorpresa la ciudad y las obras de fortificación son abandonadas. Rebelión, por otra parte, ésta de Mantua que inicia el camino de una nueva oleada de revueltas, provocada por la guerra con el Palatinado y sus aliados. Clemente intenta abortar el riesgo negociando la Pax Cristiana con los palatinos, pero éstos se niegan en redondo. El 27 d enero d 1525 es, no obstante, tomada la ciudad de Mantua por el Ej. C.
El día 31 d marzo se produce la reforma de Lutero. En realidad es la segunda dieta de Nuremberg, ya que la primera ya se produjo hace unos años, pero con menor repercusión que ésta. Lutero es excomulgado por S.S., pero ya la semilla de la herejía anida en el corazón de los alemanes y pronto lo hará en el de casi toda la Cristiandad.
La primera ciudad en seguir el ejemplo de Mantua es Siena, que se rebela el 4. d noviembre. Los rebeldes serán vencidos el 10 d junio d 1526 por las tropas pontificias, pero con grandes pérdidas por parte de éstas.
El 11. d enero d 1526 se produce un nuevo escándalo en la corte d los Medicci, que ven reducidas sus aptitudes diplomáticas, pero la buena noticia es que, el 2 d marzo, Austria negocia la Paz con el Palatinado mediante el pago de 28 ducados.
El 29 d agosto los Habsburgo heredan Bohemia y, como ya anteriormente habían heredado Hungría, parece que se conviertan al fín en un aliado poderoso para el R.D.
Lo que sí es seguro es que seguirá siendo un aliado belicoso, ya que el 26 d noviembre los austriacos declaran la guerra a Croacia, sin aliados y vasalla de Venecia. S.S. suspira resignado y espera que al menos sea una campaña corta, pero antes de que acabe, el 9 d enero, Génova (apoyada por sus aliados: Venecia, Baviera, Estrasburgo, Sajonia y Würzburgo) declaran una impía guerra contra la nación elegida de Dios. Austria y España responden también ante la agresión, apoyando al R.D.
Tras una escaramuza en que los venecianos nos derrotan y expulsan de su capital. Seguidamente S.S. concerta una Pax Cristiana con Croacia y decide reagrupar todo el Ej. d C. (22/17) en Mantua, marchando a continuación sobre la Lombardía, donde exterminamos a 20 reg. de inf. genovesa y ponemos cerco a Milán. Como siempre la debilidad del R.D. radica en las rebeliones internas y el 1 d febrero d 1528 Siena vuelve a ser asediada por los sediciosos, agravándose la situación cuando Francia se incorpora a la alianza enemiga y nos declara la guerra el 3 d marzo.
Decidido Clemente a obligar a Génova a firmar la paz antes de que el ejército francés incline negativamente la balanza y, a sabiendas por las exploraciones de la A.D. que ningún ejército defiende Córcega (donde radica una apetecible fábrica de recursos navales), un cuerpo expedicionario del R.D. se apresta a la invasión de la isla.
Pero al no ser suficiente infantería para tomar la ciudad, la A.D. debe volver a por otros 7 reg. que aguardan en Roma. El 18 d junio tomamos Milán y avanzamos sobre Génova y Córcega, pero ya los rebeldes están a punto de tomar Siena, mientras que una flota española se acerca al golfo de Liguria. Asimismo en el Norte los austriacos asedian Innsbruck, pero están a punto de perder Istria a manos de Venecia.
Durante el asedio de Génova se desata una epidemia en la ciudad, muriendo el anterior Dogo y siendo elegido para el cargo Oberto Cattaneo (5/4/5) el 13 d octubre, menos de un mes después, la ciudad de Venus cae en manos de los rebeldes.
En enero de 1529 un ejército español, al mando del Duque de Alba desembarca en Génova, con la intención de aprovechar el trabajo del Ej. d C. Ante las murallas de la ciudad, mientras que los rebeldes sieneses asedian Roma, lo que obliga a S.S. a decretar nuevas levas en Nápoles y a aceptar la Paz que Génova ofrece, pagando 25 ducados y cediéndola Lombardía al R.D. (cuya reputación sigue siendo un tanto mala). España y el R.D. abandonan Córcega, pero Austria, que ha firmado varios tratados por su cuenta, sigue en guerra, habiendo arrebatado Innsbruck a Francia, pero perdiendo Salzburgo a manos de Baviera y Triestre, que ha sido tomada por Venecia
Los cardenales reprochan a S.S. el no haber aprovechado la campaña, en la que además no estaba habiendo excesivas rebeliones, para robar los mapas genoveses, pero S.S. argumenta que no quiere que la revuelta prenda en el ánimo de las independentistas ciudades de Italia, así que prefiere negociar una paz ventajosa y dedicarse a pacificar el R.D., pero el 26 d septiembre, mientras los soldados de Cristo luchan con los rebeldes a las puertas de Roma, el detestado Carlos I de Aragón nos declara la guerra, respondiendo nuestros aliados españoles y austriacos de la S.A. El 13 d octubre es Saboya (también sin aliados como Aragón) quien nos declara la guerra y marcha sobre la Lombardía, poniendo sitio a Milán. Por añadidura, el 2 d mayo los rebeldes nos arrebatan traicioneramente el control de Módenna y el Ej. d C. , tras tomar Siena, marcha sobre la Emilia en rebeldía, previamente a enfrentarse a los saboyanos.
Afortunadamente, en la Península Ibérica España destroza a los ejércitos aragoneses y Aragón nos propone una Paz en la que deberemos pagar 27 ducados. S.S acepta para concentrarse en el próximo castigo a Saboya, pero una revuelta en Florencia retrasa al Ej. d C lo suficiente para que Saboya tome Milán y comience el asedio de la rebelde Módenna, por lo que S.S. decide realizar nuevas levas (para lo que el Cardenal del Tesoro debe pedir un préstamo) y dividiendo la tropa en dos cuerpos de ejército ataca simultáneamente a los saboyanos en ambas provincias, el 31 d abril d 1531, mientras España asdia Turín y Austria, que ya ha firmado la paz con Francia devolviéndole el Tirol, lo pasa fatal ante bavaros, sajones y venecianos
Tras derrotar a los saboyanos en todos los frentes, Módenna es tomada al asalto por nuestras tropas el 30 d julio y ponemos sitio a Milán y Turín simultáneamente
A principios del año 1532, mientras son ya muchos los príncipes alemanes que se pasan a la herejía luterana y una alianza de Francia, Baviera, Estrasburgo y Génova declaran la guerra primero a Inglaterra y Portugal y luego a Aragón, Venecia se alía con Irlanda y se registra una nueva revuelta en la ciudad de Florencia. El 1 d agosto son los campesinos sieneses los que se levantan, pasando a cuchillo a la guarnición de la ciudad y tomando por sorpresa el control de la misma y marchando sobre Roma, donde son derrotados por 4/2 reg. pontificios recién levados. Inmediatamente se produce un levantamiento en la Marca, por lo que, tras tomar Milán el 2 d noviembre, S.S. ofrece una Pax Cristiana, sin vencedores ni vencidos, a Saboya, que acepta, para proceder a sofocar las numerosas revueltas que las incesantes guerras están produciendo en el R.D.
Hasta el 26 d febrero d 1534 no es sofocada la última rebelión de las que se van produciendo (y que no enumeramos en estas Crónicas por no aburrir a sus condescendientes lectores) por todo el R.D. hasta que en dicha fecha dejan de producirse gracias a los 16 meses que el R.D. lleva ya en paz, lo que ayuda a calmar los ánimos de sus exasperados súbditos. La sangría en tropas y ducados que se ha visto obligado a realizar el R.D. le ha dejado prácticamente extenuado. En no mejor situación ha quedado Austria, que no ha recuperado el Tirol y ha perdido Istria a manos de Venecia y Wurzburgo y una provincia checa que han pasado a manos de Sajonia. En el Este, mientras tanto, ya toda Anatolia ha sido unificada bajo el poder del Imperio Otomano, que asimismo ha expulsado de Rhodas a la Orden Hospitalaria.
Un mes después Francia firma la paz con Inglaterra mediante el pago de una cantidad simbólica (días después los rebeldes de la provincia inglesa de Gascoigne se pasan a Francia) y declara la guerra al palatinado y sus aliados, apenas unos días después el Palatinado, temeroso, calma las ambiciones francesas mediante el pago de 56 ducados. Asimismo Francia negocia la paz con el obstinado y belicoso Reino de Aragón pagándole 5 ducados.
El 20 d junio d 1534, S.S., agotado, no presta la suficiente atención a los asuntos de estado y el Tesoro ha de empeñarse automáticamente en un segundo préstamo, mientras que la inflación asciende ya al 70 %. Y 2 meses después Clemente VII muere en su cama devorado por unas fiebre que su exánime organismo no puede vencer.