AAR EU2 Inglaterra: Tea at five o'clock

[unmerged(38268)]

¿Francia? ¿Y eso que es? . Menuda les ha caído. Impresionante "Guerra de los 100 años" que te has montado. A la que puedas hazte con París que como decía aquel "bien vale una misa" .

Esos créditos serán un lastre duro, pero bueno, creo que es uno de los pocos eventos para los que vale la pena pedirlos. Si lo miras desde otro punto de vista, te has ahorrado 40 años de mover DP's .

 

[yen-lo-wang]

Menuda paliza, Dustz Grande lo del Gabacho, grande :rofl:

Ahora a por el Austriaco que todavia sera un pezqueñin

 

[Dustz]

He de decir que de todas las guerras de los cien años que he hecho esta es en la que he conseguido la victoria más aplastante. Ese pedazo de paz me lo ofreció la IA, y claro está, la acepté. A veces se pasa un poco con las paces que te ofrece : Esa seguramente sería del 160% o por allí .

París quiero tenerlo controlado. Intentaré avasallarlo cuando pueda y diploanexionármelo ( ¿ si tiene vasallos puedo? ). El austríaco no me interesa demasiado, que aunque aún es débil, me queda un poco lejos de mis planes de expansión.

Mis objetivos más immediatos son diploanexionarme Navarra, Aragón, Bretaña, Borgoña, Escocia y si puedo Francia ( como he dicho antes). Por otro lado, también quiero invadir Irlanda para acabar de unificar las islas. Creo que con todo esto ya me da hasta 1500, aunque si puedo intentaré expandirme más .

 

[unmerged(38268)]

París quiero tenerlo controlado. Intentaré avasallarlo cuando pueda y diploanexionármelo ( ¿ si tiene vasallos puedo? ).

Sí que puedes. Es más, una vez te lo anexiones también podrás vasallizar y diploanexionar a sus vasallos, porque al desaparecer Francia ya no serán vasallos de nadie y podrás perdirles ser su nuevo señor .

 

[Dustz]

Henry VI

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La guerra contra Artois (1426-1428)​

Las tropas inglesas estaban deseosas de entrar en combate. Tras meses de instrucción militar profesional proporcionada por los instructores que habíamos contratado, los soldados estaban deseosos de probar las nuevas técnicas aprendidas contra el enemigo. Su oportunidad llegaría pronto.

El reino de Borgoña estaba teniendo problemas para mantener sus territorios. Había perdido gran parte de su ejército en la Guerra de los Cien años, y no había reclutado nuevos efectivos. Esta situación no pasaba desapercibida para la población borgoñona, y en los Países Bajos empezaron a haber conspiraciones contra Felipe III el bueno. Muchas no llegaron nunca a nada, pero otras empezaron a tener seguidores y se empezaron a organizar rebeliones. Ese fue el caso de la ciudad de Arras (Artois). Allí acabó estallando una revuelta popular en la que más de 5000 campesinos se alzaron contra el rey Borgoñón para conseguir la liberación de esa zona.

Desde Londres se miraraban estos acontecimientos con pasividad, pues se creía que el ejército Borgoñón acabaría por sufocar la rebelión. Y no se puede decir que no lo intentara, pero los 3000 infantes que fueron enviados contra loas campesinos fueron barridos por la furia popular.
Después que los rebeldes consiguieron someter a la guarnición de la ciudad, marcharon hacia Amberes, en Flandes, para estender la revuelta lo mayor posible. Pero mientras el ejército rebelde estaba sitiando el rico puerto Borgoñón, en Arras los líderes rebeldes se organizaron y declararon la independencia del ducado de Artois a la vez que la guerra a Borgoña.

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Tras saber esta noticia, enviamos embajadores al nuevo ducado para establecer relaciones diplomáticas con ellos: la primera acción que hicieron nuestros diplomáticos fue declararles la guerra.
Como buenos aliados, habíamos ayudado a Borgoña contra sus enemigos, puesto que nos interesaba mantener nuestra alianza y expandirnos por la zona.

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Rápidamente, la ciudad de Arras fue puesta bajo asedio por Bedford sin resistencia alguna. Mientras, el ejército Borgoñón recibía el ataque de los rebeldes de Arras en Zeeland, donde habían marchado tras conquistar Flandes, y los derrotaba.

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El sitio fue corto, y acabó en apenas seis meses. Los líderes rebeldes fueron capturados y ejecutados tras conquistar la ciudad.

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Tan sólo el duque de Artois (que habían nombrado los rebeldes) tenía influencia sobre la ciudad, y aceptó convertirse en vasallo de Henry VI para que cesasen las hostilidades.

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Tras la corta guerra, habíamos ganado territorio frente a Borgoña sin entrar en guerra con nuestros aliados. Felipe el bueno protestó por la injusta paz, puesto que le habíamos prometido que la ciudad de Arras volvería a sus manos tras la guerra, pero calló cuando le amenazamos en expulsarlos de la alianza: éramos demasiado poderosos para tenernos como enemigos.

Continuará...

 

[Dustz]

Henry VI

​

De nuevo, la guerra de los cien años (1428-1430)​

Poco a poco el país empezaba a salir de la crisis económica del último siglo. Un sinfín de reformas se estaban realizando, y gracias a ellas ya se ganaban más de 100 ducados al final de año, mientras que tan sólo cinco años atrás no se llegaban a 50.
El reino se empezó a centralizar, empezando a dirigirse todo desde Londres. Gracias a eso se consiguió aumentar un 2% el rendimiento de la producción y reducir otro 2% el coste de la investigación tecnológica.
La reducción del coste de la investigación adelantó la finalización del diseño de las llamadas Academias de Bellas Artes por parte de nuestros arquitectos reales. Una vez construidas, estas academias hacían más culta a la población y les hacía ver que provocar disturbios era una tontería, con lo que la estabilidad era más fácil de conseguir. También, como para recibir clases en ellas se tenía que pagar, se incrementaban los ingresos de la ciudad en que se construyesen.

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Pero no todo eran buenas noticias para Inglaterra. Un mensajero llegó un día a la corte con una triste noticia. Constantinopla había caído en manos de los Turcos Otomanos, infieles que seguían las doctrinas de Mahoma. De no ser porque nos metimos en un nuevo conflicto en Francia (como se explica a continuación) habríamos ido a luchar contra ellos por haber acabado con el milenario Imperio Bizantino.

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Pero en Francia la Guerra de los Cien Años nos reclamaba de nuevo. El rey de Aragón, Alfons V decidió declararle la guerra al reino del Borbonado por razones que nunca conocimos, y exigió que entrásemos en la guerra. Para mantener la alianza tuvimos que ayudarle, y de nuevo nos encontramos en guerra contra los Franceses.

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La alianza enemiga se componía de Borbonado, Auvernia, Provenza, Lorena y Francia.
Pedimos al rey de Francia que no entrara en guerra con nosotros, pues había jurado no atacarnos en el Tratado de Troyes. Él hizo caso omiso a éste y entró en la guerra ayudando al Borbonado . Lorena también respetó la alianza militar francesa y nos atacó.
Pero los duques de Auvernia y Provenza fueron unos cobardes y rompieron la alianza con Francia para salvar su culo.
Rápidamente, movilizamos a nuestras tropas y pusimos bajo sitio París, desprotegida pues el ejército francés al completo estaba sitiando Orleans

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Viendo su error, Charles VII hizo regresar a París a su ejército cruzando el río Sena. El tener que cruzar un río dificultó su ataque, y el ejército francés fue derrotado de forma humillante.
Mientras, en el sur, se puso bajo sitio Tours, capital del Borbonado. Viendo la situación, su señor nos ofreció una paz incondicional que aceptamos. Dicha paz provocó la ira del rey francés, puesto que el país que le había arrastrado a una nueva guerra ahora se retiraba de ella.
Tras esa paz, otro contingente empezó el asedio de Nancy, capital de Lorena.

​

La ciudad cayó al poco, y cuando se iba a firmar su rendición se descubrió que habían conquistado la provincia de Hessen en una anterior guerra, por lo que su país tenía dos ciudades importantes, y no una como habíamos pensado.
Antes de atacar, se envió un pequeño contingente a explorar la zona. 30.000 soldados de Lorena estaban en la región esperando nuestra llegada.

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Tal cantidad de enemigos nos hizo desistir de su conquista, puesto que las pérdidas humanas que tendríamos que afrontar para expulsar a los enemigos de la provincia serían muy altas. Por ello se decidió firmar la paz con Lorena entregando ellos 25 ducados.
A los pocos días, la guerra acababa. París se rendía y como “castigo” por haber incumplido el tratado de Troyes se exigió el vasallaje al rey francés.

​

Continuará...

 

[Dustz]

Henry VI

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La década pacífica (1430-1438)​

La década de los 30 fue una época especialmente pacífica, en la que los principales esfuerzos se dedicaron a mejorar la economía, que a poco a poco, ya se iba haciendo enormemente fuerte. Al final de ésa época, ya duplicábamos a Castilla (el segundo país con más ingresos de Europa) en cantidad de dinero que corría por nuestras arcas.

La “década pacífica” empezó irónicamente con la declaración de guerra de nuestro aliado Borgoña a Geldre. Tal declaración provocó que Navarra dejase nuestra alianza, que se pasase a la de Castilla y para el colmo, que le rindiera vasallaje al rey castellano. Tal cosa provocó la ira de Dustz, dirigente del consejo de regencia, puesto que Navarra era uno de los países que estaban en la lista de ser avasallados. Aún así, ayudamos a Borgoña en la guerra, pues también estaba en la lista, y queríamos mantener la alianza para hacerlos vasallos después.

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Pero eso suponía un problema, ya que tras las últimas guerras, la cantidad de efectivos en el ejército inglés se había reducido mucho, y si pasábamos a la ofensiva nos quedaríamos sin tropas. Por ello, tras unas horas de discusión, se decidió tan sólo estar en guerra en la teoría, y no hacer nada en la práctica. Si como suponíamos Borgoña se las apañaba sin nosotros contra Geldre, Frisonia, Oldemburgo y Munster podría conseguir algún territorio que al hacerla vasalla y diploanexionarla posteriormente pasaría a ser nuestro.

Los países contra los que estábamos en guerra.
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Tras un año de conflictos, Borgoña firmó la paz por separado anexionándose Munster. En toda la guerra no habíamos disparado un solo tiro contra el enemigo, y viendo Geldre que no queríamos el conflicto, firmamos una paz incondicional con su alianza que agradó a ambas partes.

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Durante el reto de la década no entramos en guerra con nadie, y tan sólo nos dedicamos a expandirnos económicamente.

En el tema comercial, ocurrió que algunos mercaderes que llevaban años en el negocio estaban siendo desplazados por otros más jóvenes que vendían nuevos productos que tenían más éxito que los suyos y que estaban penetrando en el mercado que hasta entonces ellos controlaban. Por ello, algunos comerciantes pidieron que se impusieran tarifas nuevas para evitar que eso ocurriera. El consejo regente denegó la petición puesto que pensaba que el mercado tenía que ser de libre competencia, sin favorecer a algunos en particular.

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Tal cambio de política comercial gustó a muchos, ya que se había llevado con inteligencia y en el momento oportuno. Para mucha gente, era una prueba de la benevolencia del consejo regente y de su interés por el bienestar del pueblo, ya que se dejaba de favorecer a algunos dando oportunidad a todos de triunfar.

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Pero, claro está, en cada buen gobierno hay siempre gente corrupta, que prefiere cobrar por hacer cosas como quiere alguien a hacerlas de la mejor forma posible. Eso es lo que ocurrió en el consejo regente inglés. Uno de los nobles que tenía más poder en el consejo, George conde de Cornwall, recibía sobornos de parte de su amigo James duque de Northumberland para que le permitiera hacer la vista gorda y cobrarle menos impuestos de su feudo. La corrupción fue descubierta al cabo de un tiempo, pero si se solucionaba se provocarían disturbios en el feudo del duque, ya que como pagaba menos al rey había bajado un 1% los impuestos en su ducado (cantidad no menospreciable). La medida había sido muy bien vista por la población, y si se volvía al anterior sistema el pueblo se enfadaría y bajaría la estabilidad. Por eso, se decidió hacer la vista gorda con la corrupción y hacer como si no existiera.

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Pero los principales gastos que se hicieron fueron en infraestructuras. Durante toda la década prosiguió la construcción de oficinas de recaudadores por todo el reino, y al final de ésta ya todas la ciudades importantes estaban equipadas con ellas.

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Más de 10 años habían sido necesarios para hacer la reforma de recaudación, pero sus efectos se dejaron ver muy rápidamente: de los 52 ducados que se ganaban a fin de año en 1428, habíamos pasado a los 300 en 1438.

Continuará...

 

[unmerged(38268)]

Esto cada vez va mejor. De hecho va tan bien que hasta no tienes ni que declarar las guerras .

Ya debe quedar poco para la diploanexión de Francia ¿no?

 

[Dustz]

Henry VI

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Anexiones y conspiraciones (1438-1455)​

Si la década de los 30 estuvo marcada por el desarrollo económico inglés, la siguiente fue una época en la que se incorporaron nuevos territorios al reino de forma diplomática. El primero de ellos fue el reino celta de Bretaña, que se incorporó a la corona inglesa en 1438. Bretaña ya llevaba siendo vasallo nuestro desde hacía 20 años y tras tanto tiempo de buenas relaciones, no tuvieron ningún inconveniente en unirse al reino de sus vecinos ingleses.

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Además de las tres provincias que componía su país, 30000 soldados bretones se incorporaron a nuestras filas, sacando al país de la decadencia militar que había sufrido en los últimos años: antes de la anexión solo se contaba con 10000 efectivos en el ejército. Tras ella, recuperábamos el estatus de potencia militar terrestre.También 3 buques de guerra bretones se incorporaron a nuestra flota.

A continuación nos dedicamos a mejorar las relaciones con Artois para que también fuera anexionado. Pero cuando le íbamos a pedir a su duque que se incorporara a Inglaterra, Borgoña le declaró la guerra a Geldre y su alianza otra vez. De nuevo, les ayudamos para mantener la alianza.

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Pero esa guerra había venido cuando menos la queríamos, puesto que el duque de Artois se fue también a la guerra contra Geldre y no nos escuchó cuando le pedimos la anexión. Por lo que nos propusimos acabar esa guerra cuando antes.
Unos días después de empezar los enfrentamientos, las tropas Borgoñonas pusieron bajo sitio Arhhem (Geldre) tras derrotar a sus tropas en las afueras de la ciudad. Sabiendo que estaban perdidos, aceptarían cualquier paz con tal de no ser anexionados a Borgoña. Nosotros les hicimos una oferta de paz incondicional que aceptaron. Como ambos éramos líderes de alianza, la guerra había acabado tan sólo unos días después de empezar. Felipe el Bueno se quejó, pero no le hicimos el mínimo caso.

Tras la guerra, fue muy fácil convencer al duque de Artois para la anexión de su ducado a nuestro reino. Le prometimos el 10% de las ganancias en Francia si aceptaba, y se lo tragó. Evidentemente no le pagamos nada .

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Con la anexión de Artois, nuevos soldados se unieron a nuestro ejército, que ya era el más grande de Europa.

Pero otra nueva guerra azotaba nuestro país. Aragón, el muy necio, declaraba la guerra a Navarra. Los castellanos deshonraron la alianza con ellos y los dejaron solos contra la potencia mediterránea. Aún así, nuestro aliado nos pidió ayuda, que le concedimos de buen grato.

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Navarra nos había traicionado diez años antes aliándose con los Castellanos y haciéndose vasallos suyos, y lo iba a pagar. Varios ejércitos nuestros marcharon hacia el sur de Francia, pero Aragón fue más rápido y cuando llegamos ya estaba sitiando todas las ciudades enemigas. Sin posibilidad de conseguir nada en la guerra, nos retiramos y esperamos a que acabara y que nuestro aliado consiguiera algún botín. Navarra se rindió unos meses después entregando Béarn a Aragón.

Por entonces corría 1442 y Henry VI llegó a la mayoría de edad. Eso suponía que a partir de entonces se convertía un monarca absoluto en pleno poder, y el consejo de regencia era disuelto, pues ya no era necesario. Sin embargo, el general Dustz, líder del consejo regente durante 20 años, fue a ver al nuevo rey. Henry VI odiaba a Dustz desde hacía mucho tiempo, pues de pequeño no le había regalado España por su cumpleaños cuando él lo había pedido, cosa que le había provocado un trauma infantil. También, desde hacía unos años le consideraba un usurpador del trono, ya que consideraba el consejo regente completamente innecesario y que él no tendría que haber esperado tantos para poder gobernar el país.

- ¿Para qué has venido?- dijo con mala gana el rey.

- Tras su proclamación como monarca absoluto, disolvió el consejo de regencia. Durante 20 gobernó el país, y consiguió situarle entre los grandes de Europa. Yo lo dirigí todo ese tiempo, por lo que si me necesitáis, me ofrezco como consejero real de la corte. – le respondió Dustz.

- Creo que llegas tarde. Ya tengo mis propios consejeros. Son Edmundo de Beaufort y Guillermo de la Pole, unos amigos míos que creo que dirigirán el país mejor de lo que lo harías tu. No te quiero en la corte. La única razón por la que no te expulso del país es porque le caías muy bien a mi padre y así honro su memoria. No te quiero volver a ver por aquí, así que márchate.

Dustz salió odiando aún más a aquel rey de lo que odiaba antes y con ganas de que alguien lo derrocase y él pudiese recuperar algo del poder que había tenido todo ese tiempo.

Dos años más tarde el rey se casó con margarita de Anjou, una francesa que empezó a obtener poder en la corte.

Una de las primeras acciones que hizo el nuevo monarca absoluto fue acabar de pagar los préstamos pedidos años antes para contratar a los instructores de armas de fuego. Sin embargo, el dinero fue obtenido retirando los fondos sociales para el pueblo, cosa que empezó a hacer impopular a Henry VI.

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El déspota también se propuso reclamar el trono de París que consideraba suyo, y ante la negativa de Charles VII, amenazó con tomar el reino de Francia por la fuerza. Por ello hizo una demostración de fuerza reclutando 20000 soldados en Londres, que tuvieron el efecto deseado y Carlos entregó la corona francesa.

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La conquista diplomática de París fue un éxito total, entre otras cosas por los 50000 soldados franceses pasaron a nuestras filas, el conseguir uno de los centros de comercio más importantes de Europa o que ninguna región del reino tenía tantos habitantes como Ile de France. También acababa definitivamente con la guerra de los cien años. Sin embargo, tal éxito diplomático de Henry VI no fue conocido por la población, ya que no se hicieron campañas publicitarias, con lo que la baja popularidad del rey no aumentó.

Otro éxito importante de Henry VI fue la abdicación del rey de Escocia en Henry VI. Otro territorio importante se incorporaba al país. La principal contribución militar escocesa fueron 10 buques de guerra, que aumentaban a 50 los que tenía nuestra flota. Esa anexión fue considerada por el pueblo como mérito del rey de Escocia por haberlo dado a Henry VI, volviendo a no mejorar la imagen del rey inglés ante la plebe.

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El siguiente objetivo del rey fue avasallar Borgoña. Aunque nuestro rey puso todo su empeño, Felipe el bueno no aceptaba hacerse vasallo. Para intentar conseguirlo, se empezaron a enviar suntuosos regalos hacia Borgoña sin éxito. Para conseguir el dinero, se subieron los impuestos, y la gente contemplaba como perdía su dinero y el rey no conseguía nada (lo que el rey no sabía es que la mayor parte del dinero se lo repartían entre los miembros de su corrupta corte, llegando a Borgoña muy pocos ducados). El enviar tanto dinero y no conseguir nada acabó provocando un ataque de locura al rey, que tuvo que retirarse de su cargo por ello. Era 1453. Por ello, se puso al mando del país Ricardo Plantagenet, Duque de York, como Lord Protector (consejo de regencia que tan sólo es una persona). Ricardo era muy popular entre el pueblo, y su proclamación como Lord Protector gustó a muchos.

La casa de York era una rama de la familia real, descendientes de Leonel de Amberes, sobre el que tendría que haber recaído la corona tras la muerte de Ricardo II, y no sobre Henry IV (abuelo de Henry VI). Por eso, ellos reclamaban su legitimidad al trono.

Ricardo Duque de York empezó a pugnar por su pretensión al trono, encarcelando a los consejeros de Henry VI y persiguiendo a los seguidores de la casa Lancaster (la de Henry VI).

Sin embargo, dos años después el rey Inglés se recuperó y la esposa de Henry (Reina margarita) expulsó a Ricardo de la corte y se alió con varios nobles contra él para reducir su influencia y sus ideas de que “el trono debería ser suyo y no de ese ursupador”.

Ricardo se encontraba enfrentado con muchos nobles para conseguir el trono, pero tenía muchos otros respaldándole. Uno de sus aliados era el general Dustz, ya bastante mayor, que apoyaba a Ricardo para recuperar algo de poder y por el odio que tenía al rey inglés. Con la ayuda de sus aliados, el duque de York reunió un ejército y se dirigió hacia Londres dispuesto a derrocar al rey inglés.

La Guerra de las Dos Rosas acababa de empezar.

Continuará...

 

[yen-lo-wang]

Unas ejcrins para hacernos a la idea ayudarian bastante....

 

[Dustz]

Unas ejcrins para hacernos a la idea ayudarian bastante....

Aquí teneis Inglaterra en 1455 tras todas las anexiones diplomáticas(malditos escoceses, siempre rebelándose ) ...

Iralnda, el Borbonado y Aragón en Orelans quedan feos en el mapa. Pronto se remediará la situación

 

[Dustz]

Henry VI

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Estalla la Guerra de las Dos Rosas (1455-1461)​

El primer combate de la guerra civil que acababa de estallar se produjo en el poblado de St. Albans. Aunque los ejércitos de ambos bandos eran de tamaño reducido, la batalla tuvo una importancia moral para los pretendientes al trono, pues era la primera vez que llegaban al combate. En la batalla, las fuerzas de Lancaster fueron derrotadas, muriendo varios líderes suyos como Somerset.

Durante los siguientes años, se producirían varios enfrentamientos entre los ejércitos de ambas casas (la de York y la de Lancaster) por todo el país. Aunque las fuerzas Yorkistas tenían muchos seguidores, los Lancaster aún mantenían el poder. Como Henry VI estaba cada vez más loco, la reina Margarita (su esposa) empezó a dirigir el país, obteniendo cada vez más poder y relegando al rey en el trono.

Entre el pueblo, había seguidores de ambas facciones. Algunas ciudades apoyaban a los York y otras a los Lancaster. Los Lancaster concentraban su poder principalmente en el centro y norte del país, mientras que Londres y el sur de Inglaterra apoyaba a los York.

​

En la Francia inglesa se miró el conflicto sin interés y los franceses permanecieron neutrales.

Nuestro país sufría un conflicto civil, pero la reina Margarita no quería que por culpa de él Inglaterra perdiera peso en Europa. Por órdenes suyas, se empezó a hacer una dura política exterior para mantener nuestras influencias.

El primer conflicto exterior en el que se tomó parte fue provocado, de nuevo, por el rey borgoñón. Felipe el bueno le declaró la guerra por enésima vez a Geldre, que estaba a aliada con Frisonia. La ambiciosa reina Margarita ayudó a nuestro aliado ansiosa de conseguir nuevos territorios.

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La mayoría del ejército estaba combatiendo en la guerra de las dos rosas, por lo que la reina hizo una hábil jugada para invadir Geldre y Frisonia con escasos efectivos. Ambas ciudades fueron puestas bajo sitio por los ejércitos borgoñones, y justo cuando iban a caer, dos pequeños contingentes liderados por dos de nuestros generales tomaron el control de los sitios y conquistaron la ciudad en nombre de Inglaterra.

Los reyes de ambos países fueron obligados a rendir vasallaje a Henry VI, aumentando el poder de la casa de los Lancaster frente a los York.

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Por esas fechas, en Inglaterra, las fuerzas Yorkistas habían derrotado el ejército de los Lancaster en la Batalla de Northampton. En la batalla, Henry VI fue hecho prisionero por los York, dejando sólo a la reina Margarita al frente de los Lancaster. Tras la batalla, las fuerzas de Lancaster se retiraron al norte del país.

Mientras, en Londres, York expuso porqué tenía que ser rey él genealógicamente al parlamento Inglés. El parlamento lo consideró y aprobó el Acta de Acuerdo (1460) en la que Ricardo sería rey tras la muerte de Henry VI.

York dejó Londres a finales del año y se dirigió a la ciudad de York donde se refugiaba la reina Margarita para acabar de una vez por todas con los Lancaster. Ricardo tan sólo marchó a atacar Margarita con 13000 hombres, y en lugar de reclutar más soldados, se gastó todo el presupuesto en la construcción de cinco buques de guerra.

Los buques construyéndose y el ejército de York listo para salir hacia norte.
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Margarita, con todo en su contra, había conseguido reunir un gran ejército gracias a un regalo al estado (300 ducados) y se había atrincherado en York. Cuando llegó Ricardo de York a la ciudad, se encontró con un enemigo con el doble de efectivos y fue derrotado de forma aplastante. Él y dos hijos suyos fueron asesinados, dejando al hijo mayor de Ricardo, Eduardo, como único pretendiente al trono York.

Poco después de la batalla, el ejército de Lancaster marchó a Londres a conquistar la ciudad, saqueando muchas ciudades por el camino, haciendo que muchas de ellas se pasasen a la causa Yorkista por el mal trato recibido.
Por el camino derrotaron a una nueva fuerza de York en St. Albans donde rescataron al rey Henry VI. Pero al llegar a Londres, se encontraron con las puertas cerradas. Al no tener provisiones para realizar un asedio, el ejército de Lancaster tuvo que retirarse de nuevo al norte.

Coincidiendo con la retirada del ejército de la reina Margarita hacia el norte, Eduardo de York entró fácilmente en Londres pues las puertas le fueron abiertas. Todo Londres y el sur de Inglaterra le apoyaba, mientras que a Henry VI sólo unas pocas tierras del norte. Con la mayor parte del país respaldándole, un enorme ejército se reclutó y liderado por Eduardo, persiguió a las fuerzas de Lancaster hacia el norte, donde fueron derrotadas en la sangrienta batalla de Towton. La mayoría de los líderes de Lancaster fueron muertos y el resto cambió de bando. Henry y Margarita sin apoyo, territorio ni ejército, se exiliaron, dejando vía libre a Eduardo para proclamarse rey de Inglaterra.

Continuará...

 

[Dustz]

Henry VI

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Situación internacional (9 de marzo de 1461)​

Inglaterra

-Puntos de Victoria: 1003

-Estabilidad: -1

- Badboy: 8,2/39

- Base de reclutamiento: 76

-Tesoro: 410 ducados

-Cantidad de provincias: 37

- Rendimiento comercial: 37%

- Rendimiento de la producción: 41%

-Ingresos mensuales: 66,13 ducados

-Inflación: 1,7%

-Ejército:

- 85193 Soldados de infantería​

​

- 35839 Soldados de caballería​

​

- 2 cañones​

-Barcos:

- 47 Buques de guerra ​

​

- 14 Transportes​

-Tecnologías:

- Tecnología terrestre: Baja Edad Media (2) ​

​

- Tecnología naval: Baja Edad Media (2)​

​

- Nivel de comercio: Renacimiento pleno (2)​

​

- Infraestructuras: Renacimiento tardío (3)​

-Política interior:

- Aristocracia: 6​

​

- Centralización: 7​

​

- Innovación: 2​

​

- Mercantilismo: 5​

​

- Doctrina ofensiva: 7​

​

- Terrestre: 6​

​

- Calidad: 10​

​

- Servidumbre: 4​

Comparativa de países

-País con más puntos de victoria: Inglaterra (1003)

-País con más inflación: Taungu (10,5%)

-País con más ingresos mensuales: Inglaterra (66,13 ducados)

-País con más rendimiento comercial: Génova (53%)

-País con más rendimiento de la producción: Inglaterra (41%)

-País con mayor tecnología terrestre: Luxemburgo (3)

-País con mayor tecnología Naval: Génova (3)

Mapas del mundo conocido

Europa​

 

[traskott]

Vas lanzado, jejejejeje, para el 1600 ya no te quedarán rivales

 

[unmerged(38268)]

Esto de tener aliados tan belicosos en ciertos momentos es una suerte porque no gastas ni en declaraciones de guerra .

Llevas un camino impresionante. A ver hasta donde llevas Inglaterra.

PD: Esos dos cañones deberías licenciarlos porque el juego a nivel de cálculo solo los tiene en cuenta de 10 en 10 (0-9=0, 10-19=1...) así que de esta manera no hacen nada pero si pagas por su mantenimiento (bueno, tampoco te va a sacar de pobre pero algo es algo).

 

[darioall]

Joder qué carrerón... 30 años de partida y a Francia ni se la ve...
Qué triste dios mío... qué triste...
Estás embalado... y ya no quedan enemigos... Si te lanzas a por Castilla y Portugal antes de que comiencen a colonizar... podrías dominar todo el mundo sin problemas... No te conformes con tus objetivos iniciales! Que me veo tomando te en lugar de café o cocaloca...

 

[invernalia]

Si señor!!! Vaya carrerón que llevas...

 

[Dustz]

Edward IV

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La consolidación del poder (1461-1467)​

Con el exilio de Henry VI y la reina Margarita, nada impedía a Eduardo coronarse nuevo rey de Inglaterra.
Su coronación oficial de hizo el 9 de marzo de 1461. El duque de York ascendió al trono con el nombre de Edward IV teniendo el respaldo de casi todo el pueblo inglés.

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Una de las primeras acciones que hizo el nuevo rey fue nombrar al ya bastante anciano general Dustz como uno de sus consejeros, por haberle respaldado en los momentos más duros de la guerra civil.

Al consolidarse como nuevo monarca, Edward se encontró con varios proyectos sobre la mesa que se habían dejado a medias debido a la huida de Henry VI.
Uno de ellos había estado desarrollado por unos viticultores franceses. Estos habían diseñado unas manufacturas llamadas refinerías que permitían convertir las uvas en vino con un rendimiento mayor que con el sistema que se usaba por aquél entonces. Esto permitía aumentar la producción un 5% además de dar trabajo a gente que trabajara en el edificio aumentando las ganancias en la zona donde se construyera (12 ducados anuales). Tal cosa también aumentaba el crecimiento de la población (2%), y el darles trabajo los hacía más pacíficos (-1 rr). Como extra, el aumentar la producción de vino permitía que el precio de éste bajara y que nuestros mercaderes lo pudieran vender con más facilidad, incrementando las ganancias del comercio un 1%. Pero lo mejor del proyecto era que los sabios que imaginaban nuevas formas de comerciar, si bebían más vino, estaban más felices y se les ocurrían más ideas (+5 ducados mensuales en comercio/refinería).
Dada la calidad del proyecto, el rey Edward lo aprobó de inmediato (aunque ya se había empezado a aplicar en el país unos meses antes).

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El único inconveniente de las nuevas manufacturas era su alto precio, pero eso no impidió que con nuestra excelente economía se reuniera el suficiente dinero en unos meses y se empezara la construcción de una refinería en Champagne.

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Uno de los grandes logros de los primeros años de Edward IV fue conseguir lo que Henry VI no había podido: el vasallaje de Borgoña. Durante años se habían estado enviando regalos a Felipe el Bueno para convencerle, pero él se negaba rotundamente resistiendo con voluntad de hierro. Sin embargo, ahora que el rey Borgoñón ya era viejo, era más fácil hacerle ceder. Por ello, Edward IV fue a visitarle. Tras unas horas de conversación, finalmente Felipe el Bueno aceptó que su país se hiciera vasallo de Inglaterra.

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La conversación con el rey Borgoñón había sido larga, usando el rey todo su talento diplomático para lograr su fin. Durante ella habían salido varios temas, y uno de ellos eran la enorme cantidad que Inglaterra se había gastado en regalos durante los últimos años. Tras hablar sobre ello, Edward se había percatado que Felipe el Bueno recibía muchos menos ducados de los que se enviaban desde Londres. Pensando en ello, el rey inglés llegó a una terrible conclusión: alguien corrupto se quedaba con parte del dinero. Al llegar a Londres, el rey puso todo su empeño en descubrir quién era y tras unos días de investigación por parte del detective Sherlock Holmes (uno de sus investigadores de confianza) se descubrió que el corrupto era ni más ni menos que Thomas, el mayordomo que llevaba las cajas llenas de ducados de la tesorería del palacio hasta la puerta de entrada y las entregaba a un transportista. El mayordomo fue detenido y ejecutado por orden del rey.

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La ejecución costó 75 ducados, ya que el verdugo tenía la gripe y se tuvo que contratar a otro. La muerte del mayordomo tuvo otro aspecto positivo (aparte de acabar con la corrupción), ya que su familia era rival de otra y para acabar con las rivalidades su esposa quería casar a su hija con el hijo de la otra. Sin embargo, el mayordomo se negaba. Tras su muerte, su esposa pudo casar a su hija y las familias dejaron de ser rivales.

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La esposa del mayordomo se llevaba muy mal con él y le odiaba con todo su corazón desde hacía tiempo. La muerte de su marido fue una bendición para ella, y para agradecer al rey haberlo ejecutado, le pidió al hijo del amigo del hermano del padre del tío de su vecina (que era mercader y navegante) diez buques de guerra para regalarlos al rey. Los buques fueron aceptados y unidos a nuestra armada, que ya contaba con 70 barcos.

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Con la flota más grande del mundo y el ejército más temible de Europa, el rey Edward se moría de ganas de emprender una acción militar. Un día miró un mapa de Europa y vio una isla al lado de Gran Bretaña de la cual sólo teníamos un trozo. Una mancha verde muy fea ocupaba el resto de ella. Edward odiaba el verde, y tal visión le horrorizó. Ese día decidió que esa mancha debía desaparecer.

Continuará...

 

[unmerged(38268)]

Muy bueno ese vasallaje de Borgoña, hay una buena tajada que sacar .

Eso sí, después no se vale independizar a los Países Bajos. Hay que estar allí sofocando revueltas hasta que se cansen .

 

[Dustz]

Muy bueno ese vasallaje de Borgoña, hay una buena tajada que sacar .

Eso sí, después no se vale independizar a los Países Bajos. Hay que estar allí sofocando revueltas hasta que se cansen .

El vasallaje me costó sus quince añitos y sus 1000 ducados, pero al final lo conseguí tras matarme a enviar regalos sin parar. Ahora mi objetivo es Aragón. Este va a ser difícil, ya que tengo hasta 1479 cuando se hace vasallo de España (Borgoña, como no existe Francia, tengo entendido que no le salta el evento de Carlos el Temerario).

Y en cuanto los países bajos... es que sale muy a cuenta hacerlos vasallo, ya que ganan un CdC, un Astillero, tres fábricas, como 20 buques de guerra en exploradores y colonizan un poco. Después te los anexionas de nuevo y es un negocio excelente . Ya veremos si los independizo o no, con todas esas ganancias te dan ganas de pulsar el botón "crear vasallo" y después, al cabo de diez años "anexionar"