Año del Señor de 1066
26 de Diciembre
Ramon Berenguer I de Barcelona, tras 31 años de buen gobierno en los que había hecho retroceder a los infieles musulmanes a través del Pla de Lleida i de los valles del Penedès, ha convocado para hoy, después del día de la Natividad del Señor, una reunión con Nobles y poderosos del Condado de Barcelona y demás condados feudatarios, en el seno del Consell General. Condes como los de Urgell, Empúries y Roselló, los más importantes, además de barones, marqueses y grandes comerciantes tomaran asiento en el Consejo.
Nobles, rics i poderosos de totes les terres catalanes cristianes
Per tal d’acomplir els deures sacres que ens són indefugibles per la nostra condició de Compte catòlic i veient que hem d’afrontar el perill infidel al sud, us crido a Consell per tal que en prengueu part.
Nobles, ricos y poderosos de todas las tierras catalanas cristianas
A fin y efecto de cumplir los sacros deberes que nos son inelidibles por nuestra condición de Conde católico y viendo que hemos de afrontar el peligro infiel en el sur, os llamo a Consell para que tomeis parte.
Ramon Berenguer ha visto como a pesar de parciales retrocesos musulmanes, estos emiratos se hacen cada día más fuertes y tienen armas muy poderosas en sus manos. Le preocupa sobretodo que algún noble ofenda o tienda batalla a cualquier jeque musulmán, torciendo la paz en el interior de los condados, una paz forjada a hierro pero bien ganada y querida por sus gentes, que todavía debería permitirle alzar las arcas condales y el desarrollo de las ciudades.
En el Consell la posición del Conde es implacable, no habiendo problemas para un acuerdo mayoritario:
- Si hem de fer la guerra, la farem. Pero la farem curosament, entre tots. I la guanyarem. L’Ebre ens espera més enllà de les nostres terres, i sens dubte serà nostre, però la terra ha de descansar per tornar a donar fruits.
- Si hemos de hacer la guerra, la haremos. Pero la haremos cuidadosamente, entre todos. Y la ganaremos. El Ebro nos espera más allá de nuestras tierras, y sin duda será nuestro, pero la tierra ha de descansar para volver a dar frutos.
Habiendo acuerdo pues, el Conde se propone algunas reformas del gobierno de cara a encauzar los próximos años con energía y cautela, rondeándose de grandes hombres de honor (Roger Despuig, Emisario, Fadric de Montsoriu, Canciller, Roger de Tàrrega, Mariscal), y mujeres de gran prestigio (Adelaida de Borja, Condestable). La nueva administración consiguió aumentar los ingresos de 2’5 Libras a 4’95.
En unos días, mientras Ramon Berenguer y su Canciller Fadric estaban barajando varias posibles esposas para su primogénito Pere Ramon, llegó un correo del Rey de Castilla a Barcelona ofreciendo una alianza. Castilla era un reino muy poderoso, y no tardaría en verse enfrascado en guerras prontas, así que prefirió no tomar en cuenta el ofrecimiento del castellano... por ahora.
Mientras tanto, el conde, sabiendo que tarde o temprano debería hacer avanzar hacia el sur la fe cristiana y aumentar el poder del condado, tenía la mirada puesta en el Ebro, y conceratamente en los contrafuertes montañosos de L’Albar (Albarracín). Paciencia. Recojamos la primera cosecha.
29 de Diciembre de 1067
Hemos recogido la primera cosecha de paz, hemos vendido toneladas de lana recién esquilada, y las nuevas zonas de tala han empezado a funcionar. Los ingresos ascienden ahora a 5’51 Libras. La economía prospera.
Augurios como las ofertas de alianza, primero de León, y luego del Emir de Toledo, reechazadas ambas, han hecho sospechar a Ramon Berenguer que la situación peninsular puede tensarse en cualquier momento. Por lo pronto, se están construyendo nuevos campos de entrenamiento donde preparar a caballeros y luchadores cristianos. El Conde, además, teme que el rey aragonés, hermano bastardo del castellano y del leonés, entre en acción y se le adelante en el Ebro, lo cual podría representar una derrota de los intereses catalanes y plantearía un panorama diferente a como lo ve el Conde. Por ahora, parece que Sancho está más preocupado por mantener seguro su castillo en Jaca.
Tras la triste muerte de su esposa, el conde quiso contraer matrimonio con la joven italiana Amalberga d’Alema, conocida en el condado de Ferrara por sus dotes como administradora (15). Amalberga pronto demostró su disposición a ser la nueva Condestable del condado, a lo que Ramor Berenguer accedió pronto. Los efectos no tardaron en hacerse notar: las nuevas cuentas daban unos ingresos de 8’21 Libras.
10 de Noviembre de 1067
Los cuatro palos de gules sobre oro, enseña de los Condes de Barcelona, ondea sobre L’Albar (Albarracín) y sobre la gran mezquita de Còrdova. Los cordobeses, aliados del jeque de Albarracín, sucumbieron a un triple frente que, gracias a Dios, se creó: El Emir de Toledo se enfrentó a ellos, a contuniación hizo lo mismo el jeque de València. Este último fué clave para nuestra victoria: los más de dos mil hombres reclutados por el Conde aprovecharon la única oportunidad posible para hacerse con el feudo de Còrdova, creada cuando el valenciano rompió con el Emir de Toledo a raíz de las tensiones de guerra. Los musulmanes siguen dividiéndose, y esto, para el Conde, supuso una muy buena señal. Sin embargo se preveía muy complicado gestionar un territorio enclavado entre grandes tierras de territorio infiel y la guerra ha causado numerosas bajas, humanas y monetarias... nada fácil de resolver.
MAPA: LA BATALLA DE L'ALBAR
26 de Agosto de 1071
Plasència ha caído. La decisiva intervención del Conde en el conficto entre el Emir toledano y el jeque valenciano se ha saldado con una feliz conquista tras el desgaste del primero. Cayó primero Calatrava desde Còrdova, despues Toledo y Conca. Ramon Berenguer ha recompensado a la familia d’Empúries con Conca y Plasència como dominios feudales, por su ayuda en la guerra contra el infiel. También el Conde ha agradecido el apoyo de la Iglesia cediendo la jurisdicción de Lleida a su obispo.
El mariscal y el Conde celebran en Toledo junto con sus caballeros estas magníicas victorias, que sin duda han frenado las esperanzas de Sancho de Castilla. De hecho, este rey asustó al Conde con una fugaz declaración de guerra contra el jeque de Calataiud, afortunadamente hicieron paces blancas la pasada Navidad.
27 de Junio de 1072
Nuestro Conde mira ahora directamente hacia el Ebro, buscando la conexión territorial imprescindible para mantener sus recientes conquistas. Molina está ahora cedida en feudo al linaje de los Cerdanya, y Calatrava al conde del Rosselló... los terrenos del interior son excesivamente vastos.
11 de Noviembre de 1075
Volvemos a casa. Poco antes de finalizar la conquista de Saragossa, una vez tomadas ya Calataiud y Tarragona, estalló algo que Berenguer Ramon nunca se esperó: Dènia/Mallorca le declaraba la guerra, y a los dos meses le seguían València y los Almorávides!
Esta vez, era necesario utilizar las nuevas reservas de Còrdova, que sumaban más de 3000 hombres bien armados al estilo morisco. En poco tiempo se levantaban los sitios de l'Albar (Albarracín) y Conca, y pocas semanas más tarde era la misma València la que estaba bajo sitio cristiano. Tras tres batallas a pié de muralla y varias semanas más de sitio, la ciudad capitulaba. El gozo del Conde se hizo notar en la ciudad, ya que tras los tres días de festejos y nuevos bautismos, València era una ciudad viva, alegre y temerosa de Dios.
Los territorios de Dènia no tardaron mucho en caer sin dificultad, pero hubo que resolver la invasión almorávide, que ponía sitio a Plasència, Calatrava y Còrdova, lo cual retrasó los embarcos hacia Mallorca y Menorca, que fueron tomadas, como Castelló, por el obispo tarraconense Guillem DeRoma, el cual recibió además Denia. Los nuevos territorios fueron repartidos entre los nobles Montsoriu, DeBesalú y D’Empúries. València, por ahora, quedaba bajo jurisdicción del conde Ramon Berenguer.
La paz con los almorávides, aunque sin términos ni grandes negociaciones, fué muy criticada por el Papa. De hecho se tenía al Conde como un escéptico frente al catolicismo, cuestión que le ofendía profundamente y que era preferible no citar en su presencia. Con 52 años de edad, Ramon Berenguer decide, mientras diseña nuevas fortificaciones para Barcelona, que es tiempo de calma y paz: Ningún otro reino cristiano le pasará por delante en la península, y ningún caudillo infiel representará ya un peligro para los cristianos. Ramon Berenguer empieza a ser llamado por los trobadores como “el Valiente”.
Desgraciadamente, tres meses más tarde nuestros correos nos indican que hay un gran ejército del Emir de Badajoç cruzando nuestras tierras hacia el norte, pretendiendo invadir el Reino de Navarra. Ramon Berenguer no podía consentir que Navarra saliese derrotada, sin embargo no le es nada agradable convocar otra vez armas, y menos... contra un cristiano. La mejor manera de sacar ventaja con la situación era apoyar directamente al Emir y liderar el cerco a los condados Navarros, reivindicando después los títulos de conde y duque, pero respetando a Sancho de Navarra como legítimo rey... aunque éste poco podía hacer ya, exiliado en el la corte de Foix.
MAPA DESPLEGABLE: LOS DOMINIOS DE BARCELONA EN 1075